ESC
Madmaxista
- Desde
- 12 Jun 2017
- Mensajes
- 17.139
- Reputación
- 31.058
Amos siempre serán amos. No eres un perro
Magnífica observación.
Le he lanzado una serie de preguntas a chat gpt, puro aburrimiento para empezar el día con alegría:
- ¿Si estamos en un sistema de continua devaluación monetaria, ¿De dónde emana el poder?.
En un sistema de continua devaluación monetaria, el poder emana principalmente de la capacidad de controlar o influir sobre los mecanismos que determinan el valor de la moneda y la economía en su conjunto. Este poder puede provenir de varias fuentes:
- El Estado y los bancos centrales: Los gobiernos y bancos centrales, como la Reserva Federal en Estados Unidos o el Banco Central Europeo, tienen un rol crucial en la emisión de dinero y el manejo de políticas monetarias. Al tener el poder de ajustar las tasas de interés, controlar la oferta monetaria y manejar la deuda soberana, pueden influir directamente en el valor del dinero y la inflación. Aunque la devaluación constante puede erosionar el poder adquisitivo del dinero, el control sobre estos mecanismos otorga a estas instituciones un poder considerable sobre la economía.
- El control de los recursos: En un entorno de devaluación, los bienes tangibles y los recursos escasos (como tierras, propiedades, energía, materias primas) suelen ganar valor frente a una moneda que pierde su poder adquisitivo. Aquellos que controlan estos recursos tienen un poder creciente, ya que sus activos no solo mantienen valor sino que pueden revalorizarse en términos relativos a la moneda devaluada.
- El sistema financiero: Las grandes instituciones financieras, al tener la capacidad de mover capital, otorgar crédito y especular en los mercados, también juegan un papel fundamental. Pueden aprovechar las fluctuaciones de la moneda y las tasas de interés para generar beneficios, posicionándose como actores clave en el sistema. Las deudas que gestionan, tanto públicas como privadas, adquieren un papel central en la dinámica de poder.
- Interconexión internacional: En un sistema globalizado, los países con monedas más estables, reservas de divisas (especialmente en dólares o euros), o activos financieros fuertes tienen un poder sobre aquellos que dependen de monedas más volátiles. Esta dependencia puede ser aprovechada para ejercer control económico y político.
- Empresas y corporaciones: En algunos casos, las grandes corporaciones, especialmente las multinacionales, pueden adquirir poder en este contexto al tener activos diversificados en múltiples países y monedas, además de su capacidad de ajustar precios, producción y localización de operaciones según las condiciones monetarias.
- ¿Podríamos decir que se está experimentando una extraña canalización de poder sobre todo lo que se encuentre a la sombra de la banca central?.
Sí, podríamos decir que existe una canalización de poder hacia aquellos actores que operan bajo la influencia directa o indirecta de los bancos centrales, y esto puede verse como una manifestación particular en sistemas de continua devaluación monetaria. Este proceso concentra poder de varias formas:
- Monopolio sobre la creación de dinero: Los bancos centrales tienen la facultad exclusiva de emitir moneda fiduciaria, y mediante políticas como la expansión cuantitativa o el manejo de las tasas de interés, influyen sobre la liquidez en la economía. Este poder sobre la creación y regulación del dinero puede favorecer a ciertos sectores que tienen acceso preferente a capital barato, como el sector financiero y las grandes corporaciones.
- Redistribución de riqueza: A medida que se devalúa la moneda, quienes tienen acceso temprano a la nueva creación de dinero (a través de préstamos o inversiones financiadas por el sistema bancario) suelen beneficiarse antes de que los efectos inflacionarios erosionen el poder adquisitivo del resto de la población. Esto crea un efecto de "canalización" de la riqueza hacia aquellos que están más cerca de los bancos centrales y sus mecanismos de emisión.
- Aumento de la dependencia de la deuda: Las políticas monetarias expansivas suelen estar acompañadas por un aumento del endeudamiento, tanto a nivel gubernamental como privado. Esto refuerza la influencia de los bancos centrales y las instituciones financieras, ya que la deuda y su refinanciamiento se vuelven una herramienta clave para mantener la estabilidad económica. Los gobiernos y empresas que dependen de este crédito suelen estar "a la sombra" de las decisiones de los bancos centrales.
- Control indirecto del mercado: A través de la manipulación de tasas de interés y la intervención en los mercados de bonos, los bancos centrales pueden influir en los precios de activos financieros como acciones, bonos y bienes inmuebles. Esto crea un entorno donde los precios de mercado dependen en gran medida de las políticas de los bancos centrales, canalizando poder hacia aquellos que dominan o entienden mejor estas dinámicas.
- Concentración de poder en el sector financiero: En un contexto de continua devaluación y políticas monetarias expansivas, el sector financiero suele beneficiarse desproporcionadamente. Las grandes instituciones bancarias y de inversión tienen la capacidad de influir en las decisiones de política económica y aprovechar la liquidez disponible para generar rentabilidad en mercados especulativos, lo que acentúa la canalización de poder hacia estos actores.
- Pregunta final: ¿Si el dólar dejase de percibirse como hegemónico a nivel mundial, cada estado tendería a replegarse sobre si mismo o nos veríamos forzados a huir hacia adelante generando una especie de convergencia monetaria?.
Si el dólar perdiera su estatus hegemónico a nivel mundial, el impacto en los estados y el sistema financiero global podría provocar uno de estos dos escenarios:
1. Repliegue hacia el nacionalismo económico:
Cada estado podría tender a replegarse sobre sí mismo, promoviendo políticas económicas más nacionalistas y proteccionistas. Este escenario incluiría:- Fortalecimiento de las monedas locales: Al perder el dólar su centralidad, los países podrían intentar fortalecer sus monedas nacionales o regionales, buscando reducir la dependencia de divisas extranjeras. Esto podría implicar una reorientación hacia economías más autosuficientes, con menos comercio internacional y más intervención estatal.
- Políticas proteccionistas: Los estados podrían imponer barreras comerciales para proteger sus economías de la volatilidad monetaria y las crisis internacionales. Esto podría fomentar el surgimiento de bloques económicos cerrados, con comercio más limitado y fragmentación económica global.
- Conflictos monetarios: La pérdida de un ancla global como el dólar podría desatar una "guerra de divisas", donde los países manipulan sus monedas para obtener ventajas competitivas en exportaciones, lo que incrementaría la inestabilidad económica global.
2. Convergencia monetaria hacia un sistema supranacional:
Por otro lado, un colapso de la hegemonía del dólar podría forzar una "huida hacia adelante", donde los estados busquen converger en un sistema monetario global o regional, para estabilizar las finanzas internacionales. En este escenario:- Creación de una moneda supranacional: Países o bloques regionales podrían intentar crear una nueva moneda internacional o supranacional que sustituya al dólar. Ya existen precedentes, como los Derechos Especiales de Giro (DEG) del FMI o iniciativas regionales como el euro. En un contexto de convergencia, bloques como los BRICS podrían intentar crear su propia moneda común para el comercio internacional.
- Fortalecimiento de bloques regionales: En lugar de una moneda global única, podríamos ver la creación de varios sistemas regionales convergentes. El euro en Europa, un potencial “Unit” para los BRICS, o monedas compartidas entre alianzas económicas podrían estabilizar las relaciones comerciales dentro de cada bloque.
- Mayor integración económica: Para asegurar la estabilidad monetaria, los estados podrían verse obligados a aumentar la cooperación en materia económica y financiera. Esto requeriría nuevas instituciones supranacionales que coordinen políticas monetarias y comerciales, en lugar de depender de un solo actor hegemónico.
Factores clave para determinar el resultado:
- Interdependencia económica global: La globalización ha vinculado profundamente las economías, lo que hace más difícil un repliegue completo sin graves consecuencias para el comercio y el crecimiento económico.
- Confianza en nuevas instituciones: Para que se dé una convergencia monetaria, los estados tendrían que confiar en la capacidad de nuevas estructuras supranacionales para gestionar de manera eficiente el sistema monetario global. Esto podría enfrentar resistencias políticas, ya que implicaría la cesión de soberanía en áreas clave.
- Riesgo de caos financiero: Si la caída del dólar no se gestiona de manera organizada, podría provocar una crisis financiera global que incentive a los estados a buscar soluciones conjuntas, incluso si antes eran reacios.
Ambos escenarios son plausibles y podrían coexistir. Pues es verdad.
Es verdad, Los estados se repliegan sobre si mismos, sobre su propia ciudadanía mientras continúa una especie de convergencia monetaria. Generando una especie de poder global sin que nos percatemos de ello.
Habrá que ver, en cuyo caso, ¿Quién será el maldito amo? me pregunto y dicho esto......
Remar.
Última edición: