Sólo hace que cumplir la ley natural, que toda mujer lleva encima. Escoger lo peor, incluso en ambientes poco evolucionados, la ley se cumple siempre. Es un equivalente al malote de ciudad, pero en iluso y mediocridad. La expresión de orate, no tiene desperdicio.
Incluso aunque no supiera leer ni escribir, sabria distinguir un buen hombre del pueblo, de un chulillo punky.