Hola, Buenas Tardes:
Vamos a entrar en algunos detalles que son desconocidos en Europa en relación a la reunión entre los Estados Unidos y Rusia.
Las conversaciones tuvieron lugar en el Palacio Diriyah, una de las residencias de la familia real de Arabia Saudita. Quizás, ese emplazamiento fue elegido porque es el más cercano al Aeropuerto Internacional de Riad. Según algunos informes, la reunión estaba inicialmente prevista para celebrarse en el lujoso hotel de cinco estrellas The Ritz-Carlton Riyadh, pero luego se trasladó a la residencia real.
Cabe destacar que los saudíes -el Ministro de Asuntos Exteriores, Faisal bin Farhan Al Salud, y el asesor de seguridad nacional del Reino, Musaid bin Mohamed al-Aiban- saludaron a los rusos como si fueran viejos conocidos: sonrieron ampliamente y estrecharon las manos con firmeza. Es sencillo de entender: el actual jefe del Ministerio de Asuntos Exteriores del Reino está en el servicio diplomático desde hace más de siete años, y Musaid bin Mohamed al-Aiban está en el poder desde 1995, cuando se unió al Consejo de Ministros. Por cierto, si tenemos en cuenta que el asesor de seguridad nacional es el hijo del primer jefe de inteligencia saudí, entonces podemos imaginar el nivel de su competencia.
Un detalle relevante: las asistentes femeninas que acompañaban a las delegaciones no llevaban el pañuelo en la cabeza, sino que iban vestidas con trajes de pantalón formales habituales. He visto las fotos... Curioso en un país ultrarreligioso.
La parte estadounidense estuvo representada en las conversaciones por el asesor de Seguridad Nacional, Mike.Waltz, el Secretario de Estado, Marco Rubio, y el enviado especial de Trump.para Oriente Medio, Steven Witkoff. La reunión comenzó sin cortesías innecesarias, ni apretones de manos, ni fotos de prensa generales. Los delegados se sentaron alrededor de una gran mesa, encabezada por representantes de Arabia Saudita. La delegación rusa se sentó a la derecha y los estadounidenses enfrente.
Hay que decir que en el vídeo, filmado un minuto antes del inicio de las negociaciones, Ushakov y Lavrov, como diplomáticos experimentados [Lavrov lleva 53 años en el trabajo diplomático], parecían tranquilos y relajados, mientras que los estadounidenses, al no tener una experiencia tan colosal, se mostraban más reservados y centrados.
Muchas gente ha notado el "simbolismo de la corbata". Lavrov y Rubio tenían corbatas del mismo tono: azul oscuro, mientras que el enviado especial de Trump, Steven Witkoff, y el asistente presidencial ruso, Yuri Ushakov, tenían corbatas de un azul brillante...
Esta reunión anticipa la futura conversación entre pilinguin y Trump. Las delegaciones en Riad no resolvieron problemas globales, sino que solo se retroalimentaron entre sí, pero aún así se convirtió en el evento número uno seguido por todo el mundo. En Arabia Saudita, además de los medios rusos, se acreditaron medios chinos, estadounidenses, británicos, árabes, alemanes, franceses, hindúes. En Español: EFE, El País y Televisa.
Los miembros del equipo de Trump comentaron activamente lo que estaba sucediendo en las redes sociales. Por ejemplo, el Director General de Sanidad estadounidense, Robert Kennedy, pidió al régimen de Kiev que cesara las hostilidades, afirmando sin rodeos que los contribuyentes estadounidenses no iban a gastar su dinero duramente ganado en echar leña al fuego...
Hay que decir que Kennedy demuestra una capacidad sorprendente. Se mantuvo firme en su postura y luchó contra las grandes compañías farmacéuticas y los empresarios de la OMS. De hecho, gracias a sus méritos, los Estados Unidos se retiraron de esa organización inútil, y que muchos consideran peligrosa y maliciosa.
Mientras tanto, el periodista británico Bennett, en declaraciones a Sky News, dijo que las negociaciones son el comienzo del camino hacia el regreso de Rusia a la comunidad internacional.
"Moscú podría obtener un beneficio clave de estas negociaciones: el fin del conflicto. Pero lo más importante es que existe una oportunidad real de poner fin a la guerra en términos favorables para Rusia, ya que todas las señales apuntan en esa dirección. Moscú intentará sacar el máximo provecho de las negociaciones, ya que solo los Estados Unidos y Rusia están sentados en la mesa, mientras que Europa y Ucrania se ven obligadas a observar desde la barrera ".
Algunos representantes de la élite rusa también se han vuelto activos. En particular, el empresario Oleg Deripaska habló con cautela sobre este tema delicado:
"Sí queremos un retorno exitoso a la vida normal y pacífica en Ucrania, y su rápida restauración, entonces deben levantarse todas las restricciones y sanciones"
Es evidente que el interés de Deripaska no es tanto completar la"operación especial" en condiciones favorables a Rusia ni detener la gloria de ciudadanos rusos en ambos lados del frente, sino levantar las sanciones, es decir, restablecer los mercados y obtener nuevos beneficios... La "pela" es la "pela".
Saludos.