Lo que los nazis tomaron de Marx

En realidad da igual lo que fueran, lo que dice Mises con todo el sentido común es que lo que importa es el discurso, el argumento, no de quien provenga. No hace falta acudir al argumento marxista para destruir el argumento marxista.
En efecto. Pero da el doble de gustito demostrar que es una cosa sin necesidad de salir del mismo, tan solo llevándolo a sus consecuencias lógicas.
 
Volver