Lisionak
Panzerkardinal
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A raíz del hilo de la actriz de cine clásico más guapa, que para mí siempre fue y siempre será Vivien Leigh, me he vuelto a ver “Lo que el viento se llevó” y he terminado con un montón de ideas a las que doy vueltas en la cabeza. Conste que para mí “Lo que el viento se llevó” es como para otros “Bailando sobre la lluvia”. Es un cine que te da un chute de fuerza, de voluntad, que va más allá de la visión pasiva que acompaña a la mayor parte de películas. Y el mérito es casi todo de Vivien Leigh. Casi a su altura estaría Clark Gable, pero a cierta distancia… Siempre pensé que ese papel lo podía haber hecho igualmente o mejor Errol Flynn.
Bien. Las sorpresas comienzan en el minuto cero. Los distribuidores han considerado imprescindible encabezar la película con esta advertencia: “Lo que el viento se llevó” es un producto de su tiempo y describe prejuicios étnicos y raciales que, desafortunadamente, eran comunes en la sociedad americana. Estas escenas racistas eran entonces y son ahora equivocadas. Para crear un futuro más justo, equitativo e inclusivo, primero tenemos que reconocer y entender nuestra historia”.
Tal cual. Como una producción Disney cualquiera. Porque están a punto de vetarla y tirarla de todos los catálogos. La producción más taquillera de la historia del cine y, probablemente, una de las más conmovedoras. Pues a por ella.
¿Debe ser prohibida Lo que el viento se llevó? - Salud Nutrición Bienestar
En fin, no quiero hacer un despiece de la película ni ponerla al microscopio. Pero sí quiero señalar dos escenas que están directamente en el punto de mira de la wokada.
La primera es obvia. El análisis del guion por los historiadores ha señalado que hubo muchos cambios y supresiones para no entrar en conflicto con la comunidad de color y para suavizar la esclavitud que Mitchell romantiza en su novela. Hay una escena, sin embargo, que no pudieron evitar: la acción de Ashley Wilkes y el segundo marido de Scarlett, Frank Kennedy, sobre aquellos que intentaron violarla y que se salda con dos muertos (uno el marido de Scarlett). Sobre esa escena ha caído y sigue cayendo de todo, porque es evidente que es una acción del Ku Klux Klan. El problema, como siempre, es no contextualizar la escena, pensando que el Sur vencido en la guerra de Secesión y la emancipación de los esclavos fueron realidades pacíficas.
En parte, ello es un producto a medias del marxismo ramplón (todo se reduce a una lucha de clases burguesía-proletariado) y la ideología post-1945, convenientemente maridadas. Ello deja fuera del radar conflictos raciales marcadamente incómodos, desconociendo que la liberación de esclavos da lugar históricamente a guerras raciales. ¿Qué ocurrió en Haití con Louverture? ¿Por qué, pese a haberse emancipado toda la América continental, Cuba siguió siendo española? Porque tenían miedo de la guerra de razas y la persecución y aniquilación de la minoría blanca que eso provocaría. Las primeras reacciones que se produjeron en un Sur vencido fueron defensivas y sólo después de una tensa convivencia llegarían a ser lo que todos hemos podido ver en el siglo XX.
La segunda escena que provoca oleadas de ira pogre es la escena de la violación de Scarlett O’Hara por un Rhett Butler borracho y celoso. Toda la falange viogen al ataque. Aun cuando la película muestra en la escena siguiente a una Scarlett tan feliz y satisfecha como no se la ha visto en toda la película (lo que deja muy mal a todos sus amantes, incluido Butler). La novela dice lo siguiente:
“El hombre que la había llevado por las escaleras oscuras era un extraño cuya existencia no había soñado. Y ahora, aunque intentó obligarse a odiarlo, intentó indignarse, no pudo. Él la había humillado, lastimado, usado brutalmente durante una noche loca y salvaje y ella se había gloriado de ello. ¡Oh, debería estar avergonzada, debería retroceder ante el recuerdo mismo de la caliente, arremolinada oscuridad! Una dama, una verdadera dama, nunca podría levantar la cabeza después de una noche así. Pero, más fuerte que la vergüenza, era el recuerdo del éxtasis, del éxtasis de la rendición”.
La novela y la película dicen lo que dicen.
Sin embargo, las críticas del pelo jovenlandesado han dicho:
“Intentar y hacer que Scarlett finalmente se enamore de Rhett después de todo esto es el máximo insulto para las mujeres; es decir, es dar luz verde para que los hombres abusen y humillen a las mujeres y, si lo hacen suficientemente, ¡las mujeres se enamorarán de ellos a cambio! El mensaje del autor [del film] parece ser el de que Scarlett no solo está condenada a buscar a [tipos de] Rhetts para humillarlas, sino que, de hecho, debería tener a Rhetts para ponerlas en forma y romperles el ánimo”.
O:
“Corte a la mañana siguiente [refiriéndose al cambio de escena]: Scarlett se estira lujuriosamente en la cama, sonriendo, cantándose una cancioncita alegre. ¿Ven? Eso es justo lo que la cortesana necesitaba todo el tiempo. Y si crees eso, creerás cualquier cosa. Pero quizás… ¡Quizás ella le había roto las rótulas, además! ¡Seguramente eso es lo único que podría hacerla sonreír, en este momento! Y esa debe ser la verdadera razón por la que tiene que irse a Europa [refiriéndose al viaje que Rhett inicia justo después de esa secuencia], a visitar a un buen especialista en rótula. Por supuesto, no pueden decir eso en el guion, pero estoy segura de que eso es lo que sucedió, en realidad”
En fin, así está el patio. Esta película se ha convertido en campo de batalla con la wokada porque las cosas ya no dan más de sí. Van a saco. Analicen lo que la peli les sugiera y puedan añadir a este comentario hecho justo después de verla.
La prohíban o la mutilen, esa película será siempre para mí la alegría de vivir y ver los ojos y la sonrisa de Vivien Leigh en la cima de su belleza.
Bien. Las sorpresas comienzan en el minuto cero. Los distribuidores han considerado imprescindible encabezar la película con esta advertencia: “Lo que el viento se llevó” es un producto de su tiempo y describe prejuicios étnicos y raciales que, desafortunadamente, eran comunes en la sociedad americana. Estas escenas racistas eran entonces y son ahora equivocadas. Para crear un futuro más justo, equitativo e inclusivo, primero tenemos que reconocer y entender nuestra historia”.
Tal cual. Como una producción Disney cualquiera. Porque están a punto de vetarla y tirarla de todos los catálogos. La producción más taquillera de la historia del cine y, probablemente, una de las más conmovedoras. Pues a por ella.
¿Debe ser prohibida Lo que el viento se llevó? - Salud Nutrición Bienestar
En fin, no quiero hacer un despiece de la película ni ponerla al microscopio. Pero sí quiero señalar dos escenas que están directamente en el punto de mira de la wokada.
La primera es obvia. El análisis del guion por los historiadores ha señalado que hubo muchos cambios y supresiones para no entrar en conflicto con la comunidad de color y para suavizar la esclavitud que Mitchell romantiza en su novela. Hay una escena, sin embargo, que no pudieron evitar: la acción de Ashley Wilkes y el segundo marido de Scarlett, Frank Kennedy, sobre aquellos que intentaron violarla y que se salda con dos muertos (uno el marido de Scarlett). Sobre esa escena ha caído y sigue cayendo de todo, porque es evidente que es una acción del Ku Klux Klan. El problema, como siempre, es no contextualizar la escena, pensando que el Sur vencido en la guerra de Secesión y la emancipación de los esclavos fueron realidades pacíficas.
En parte, ello es un producto a medias del marxismo ramplón (todo se reduce a una lucha de clases burguesía-proletariado) y la ideología post-1945, convenientemente maridadas. Ello deja fuera del radar conflictos raciales marcadamente incómodos, desconociendo que la liberación de esclavos da lugar históricamente a guerras raciales. ¿Qué ocurrió en Haití con Louverture? ¿Por qué, pese a haberse emancipado toda la América continental, Cuba siguió siendo española? Porque tenían miedo de la guerra de razas y la persecución y aniquilación de la minoría blanca que eso provocaría. Las primeras reacciones que se produjeron en un Sur vencido fueron defensivas y sólo después de una tensa convivencia llegarían a ser lo que todos hemos podido ver en el siglo XX.
La segunda escena que provoca oleadas de ira pogre es la escena de la violación de Scarlett O’Hara por un Rhett Butler borracho y celoso. Toda la falange viogen al ataque. Aun cuando la película muestra en la escena siguiente a una Scarlett tan feliz y satisfecha como no se la ha visto en toda la película (lo que deja muy mal a todos sus amantes, incluido Butler). La novela dice lo siguiente:
“El hombre que la había llevado por las escaleras oscuras era un extraño cuya existencia no había soñado. Y ahora, aunque intentó obligarse a odiarlo, intentó indignarse, no pudo. Él la había humillado, lastimado, usado brutalmente durante una noche loca y salvaje y ella se había gloriado de ello. ¡Oh, debería estar avergonzada, debería retroceder ante el recuerdo mismo de la caliente, arremolinada oscuridad! Una dama, una verdadera dama, nunca podría levantar la cabeza después de una noche así. Pero, más fuerte que la vergüenza, era el recuerdo del éxtasis, del éxtasis de la rendición”.
La novela y la película dicen lo que dicen.
Sin embargo, las críticas del pelo jovenlandesado han dicho:
“Intentar y hacer que Scarlett finalmente se enamore de Rhett después de todo esto es el máximo insulto para las mujeres; es decir, es dar luz verde para que los hombres abusen y humillen a las mujeres y, si lo hacen suficientemente, ¡las mujeres se enamorarán de ellos a cambio! El mensaje del autor [del film] parece ser el de que Scarlett no solo está condenada a buscar a [tipos de] Rhetts para humillarlas, sino que, de hecho, debería tener a Rhetts para ponerlas en forma y romperles el ánimo”.
O:
“Corte a la mañana siguiente [refiriéndose al cambio de escena]: Scarlett se estira lujuriosamente en la cama, sonriendo, cantándose una cancioncita alegre. ¿Ven? Eso es justo lo que la cortesana necesitaba todo el tiempo. Y si crees eso, creerás cualquier cosa. Pero quizás… ¡Quizás ella le había roto las rótulas, además! ¡Seguramente eso es lo único que podría hacerla sonreír, en este momento! Y esa debe ser la verdadera razón por la que tiene que irse a Europa [refiriéndose al viaje que Rhett inicia justo después de esa secuencia], a visitar a un buen especialista en rótula. Por supuesto, no pueden decir eso en el guion, pero estoy segura de que eso es lo que sucedió, en realidad”
En fin, así está el patio. Esta película se ha convertido en campo de batalla con la wokada porque las cosas ya no dan más de sí. Van a saco. Analicen lo que la peli les sugiera y puedan añadir a este comentario hecho justo después de verla.
La prohíban o la mutilen, esa película será siempre para mí la alegría de vivir y ver los ojos y la sonrisa de Vivien Leigh en la cima de su belleza.
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