Me temo que no sólo tienes problemas de cognición sino también de comprensión lectora.
A) Vuelves a no entender qué significa Tradición, ni en minúscula ni en ningún sentido, aunque lo hayan explicado cientos de veces en letras de oro tantos oradores carlistas, que buena falta te hace leer. Y no hay excusa con la dificultad del lenguaje que es cristalino como el agua, ni la dificultad de encontrar sus obras, que están a golpe de mano en muchas bibliotecas virtuales. Con un par de párrafos de Vázquez de Mella se te curaría la incomprensión de lo que es la Tradición. Y para ponértelo fácil le evoco a él: es Tradición lo que prolonga sin abolir, lo que continúa sin demoler. Quién sea tan orate de creer que es Tradicional llevar pelucón ilustrado en el año 2023 es que no entiende ni que el sol calienta. Tradicionales son las leyes aunque cambie su forma, si su esencia continúa. ¿O es que no sabes cuántas veces cambiaron las leyes sucesorias en los reinos de las Españas, sin que por eso dejen de ser tradicionales, cuando se reforman de acuerdo al Derecho? ¿No sabes que cambios hubo, o no sabes que tradicionales fueron?
B) Me temo que el que no tiene idea de qué es la dicha Pragmática Sanción eres tú, y pones fuentes que ni lees. Aquí pone lo que ya te expuse que explicó Francisco Elías de Tejada: en el año 1830 Fernando VII da por hecho que su padre, en 1789, cambió la ley de sucesión española. Cosa que no hizo. Tal es así, que el mal llamado Auto Acordado (por el cuál se introduce en Castilla y luego se extiende a todos demás reinos la reinstaurada sucesión en varón) bajo el propio Carlos IV se publicó como vigente en la Novísima Recopilación del año 1805, donde está de forma esencial ese auto acordado. Falsifican la historia los autores liberales y de forma bien triste, por ser tan clara la cuestión y estar bien documentada.
C) Nunca se hizo la jura formal de don Carlos V como príncipe de Asturias, primero, porque el carácter que tenía no era conditio sine qua non para la sucesión a la corona; segundo, porque habían infestado de revolución toda la política española desde la oleada turística napoleónica (y aún décadas antes), habían causado una guerra civil que no se extinguió, y todos los resortes del poder estaban en manos de liberales que aborrecían toda tradición española (y sobre todo lo que pudiese devenir en que ostentase el poder alguien genuinamente Anto revolucionario como don Carlos). Me hace gracias que los propios liberales acusen a don Carlos de no haber profesado un título, que no era determinante para la sucesión, y que ellos mismos aborrecían. ¡Grandes abogados de las buenas costumbres! Nota: de lo primero que hicieron en el poder es determinar que el título de Príncipe de Asturias no determinase la sucesión a la corona, por si había dudas.
D) Me temo que quien no lo entiendes eres tú. Porque los carlistas no defienden que sean sólo hombres, o de línea paterna directamente, los únicos con derecho a gobernar la monarquía. Es totalmente absurdo, y te reto a que pongas un solo autor que así lo afirme. Al contrario, lo que siempre se ha dicho es lo que afirma todo jurista: que es el Derecho el que manda. Y lo que dice el Derecho y decían las leyes es esto, el Auto acordado del rey Felipe V en 10 de mayo de 1713:
«Mando, que de aquí adelante la sucesión de estos Reynos y todos sus agregados […]vaya y se regule en la forma siguiente.
Que por fin de mis días suceda en esta Corona el Príncipe de Asturias, Luis mi muy amado hijo, y por su fin su hijo mayor varón egítimo, y sus hijos y descendientes varones legítimos y por línea recta legítima,
nacidos todos en constante legítimo matrimonio, por el orden de primogenitura yderecho de representación conforme á la ley de Toro.
A falta del hijo mayor del Príncipe, y de todos sus descendientes varones de varones que han de suceder por la orden expresada, suceda el hijo segundo varón legítimo del Príncipe, y sus descendientes varones de varones legítimos y por línea recta legítima […].
Y á falta de todos los descendientes varones de varones del hijo segundo del Príncipe suceda el tercero y quarto, y los demás que tuviere legítimos; y sus hijos y descendientes varones de varones, asimismo legítimos y por línea recta legítima […], hasta extinguirse y acabarse las líneas varoniles de cada uno de ellos […].
Y siendo acabadas íntegramente todas las líneas masculinas del Príncipe, Infante, y demás hijos y descendientes míos legítimos varones de varones, y sin haber por consiguiente varón legítimo descendiente mío, en quien pueda recaer la Corona según los llamamientos antecedentes, suceda en dichos Reynos la hija o hijas del últimoreynante varón cosanguíneo mío en quien acabase la varonía; y por cuya fin sucediere la vacante, nacida en constante legítimo matrimonio, la una después de la otra,
y prefiriendo la mayor á la menor, y respectivamente sus hijos y descendientes legítimos por línea recta y legítima, nacidos todos en constante legítimo matrimonio»
De lo que se ve que no se excluye a ninguna mujer de poder suceder legítimamente. Es la preferencia total el varón, pero no exclusividad del varón. Y por esta misma ley, que es la que imperaba entonces, aunque Fernando VII no lo creyese (o se hiciese el loco por evidentes razones) la sucesión caía en Carlos V, varón por lo demás intachable y capaz como bien se vio cuando lidera a su patria contra la imposición revolucionaria.
Y para que te quede más claro y esquematizado, aquí está el archiconocido "¿Qué es el Carlismo?" del enorme jurista Elías de Tejada, dónde no queda lugar a dudas.
E) Como te he expuesto, si es que lo has entendido, de acuerdo a Derecho es la dinastía carlista la legítima reclamante del trono de las Españas. El falso derecho que han impuesto, de la mano de las grotescas constituciones, no es Derecho, como no se han cansado de señalar tantísimos sabios varones. Desde el mismo momento del verdadero golpe de Estado, reconocido por los propios liberales (aunque siempre intentan justificarlo con sinrazones revolucionarias), toda la dinastía liberal es un fraude, sin contar con las muchas "demasías" de los supuestos cabezas de familia, de dudosa calidad jovenlandesal, y más aún dudosa fidelidad conyugal.
F) Tú vuelves a no entender lo que ya te señalé: no hay carlista alguno que diga que es el "revelarse" lo que otorga legitimidad, porque es un disparate, y porque además siempre se ha dicho que es el origen de acuerdo a derecho y el ejercicio según la ley cristiana lo que otorgó legitimidad al gobernante. Y si no, señala uno sólo que diga lo que tú afirmas; cien puedo decirte yo de lo contrario.
¿Lo estás entendiendo?