Intel se ha tirado viviendo del cuento desde Haswell. En cuanto ha dejado de poder meter cores para seguir aumentando el rendimiento ha empezado la fiesta. Que puedas comprar procesadores de hace 10 años en configuraciones x99 dual por cuatro pesetas y que el rendimiento esté a la par dice mucho.
Sobrevivieron al fallo de FDIV con un soporte de lujo hace décadas, porque eran la cabeza del león. Pero ahora la historia es diferente. La respuesta dada al fiasco de la 12 y 13 les va a pasar factura.
Los hijos de ARM pegan fuerte, 26 años después que intel abandonase StrongARM. Cada generación de Apple Silicon, una CPU de móvil, con consumo de móvil pero rendimiento de sobremesa, es un terremoto en la industria.
La antigua CPU del pobre (AMD) les ha adelantado por la derecha en prestaciones y precio. No de ahora, esto viene de cuando intentaron el elemento de itanium. Intel se juntó con HP, tenían Alpha, tenían PA-RISC, quisieron innovar metiendo un lock al mercado y AMD les comió la tostada con x64.
En GPUs intel da ascopena, mientras que su competencia AMD mete unas APUs que mantienen el tipo. Comparar con nVidia ni cotiza.
El futuro se escribe con T de Taiwán o TSMC. Motorola también era una subida de peso de esas que no podían caer y acabó siendo el juguete roto de google.