Es todo tan absurdo... el futbol femenino será asi?
Sidrán es un alquimista del absurdo, su método es mantener en el 11 el ingrediente justo de capacidad ofensiva y goleadora, haciendo los oportunos cambios, para mantener el unocerismo y evitar el desastre.
Es como un torturador que causa el dolor justo para quebrar la voluntad de la victima, en este caso la aficion, pero sin matarla.
Consigue una especie de extasis en el que la crítica puede ser considerada un aspaviento y el silencio puro colaboracionismo.
Es un me gusta la fruta en todas sus acepciones difamatorias y laudatorias.