Sara Montiel tuvo una hija con el malo de Trotsky
Ramón Mercader en su etapa juvenil y Sara Montiel.
- 'Lecturas' desvela que Ramón Mercader es el padre de la niña que dio a luz la artista. A ella le dijeron que nació muerta, pero fue adoptada en Valencia
- A. CORBILLÓN
30 enero 201500:22
AddThis Social Bookmarking Sharing Button Widget
Revolucionó la escena española en vida y ahora, casi dos años después de fallecer, reescribe la de personajes históricos. Sara Montiel dio a luz a una niña, tal y como reveló la semana pasada la revista ‘Lecturas’. Fue fruto de un apasionado romance que mantuvo durante su etapa mexicana, donde probó fortuna a partir de 1950, cuando apenas contaba con 22 años. Vivió un parto complejo que requirió anestesia y cesárea. Además, hubo que extirparle el útero, por lo que ya no pudo tener más hijos. A Sara le dijeron que la niña había nacido muerta, aunque en realidad fue dada en adopción a una familia de Valencia. Su entorno no quería que pusiera en riesgo una prometedora carrera como actriz. El secreto apenas lo sabían la hermana de Saritísima y José de la Rosa, su peluquero y hombre de confianza. De hecho, Sara pensó siempre que se llevaría todo a la tumba.
Esta semana, la misma publicación desvela el nombre del padre. Otro bombazo. Fue el militante comunista catalán Ramón Mercader, que pasó a la historia por acabar con la vida del líder soviético León Trotsky en su exilio mexicano. Mercader lo mató clavándole un piolet en la cabeza. El periodista Carlos Ferrando confiesa en ‘Lecturas’ que conocía la noticia por la propia Sara, pero pensó que no se desvelaría nunca.
Hijo de la burguesía catalana, refinado y culto, Mercader entró en los servicios secretos rusos durante la Guerra Civil. Tuvo una vida doble, fue espía y acabó en México, donde Stalin le encargó eliminar al hijo descarriado de su revolución. Ramón, que se hacía llamar Jacques Mornard, cumplió el encargo el 20 de agosto de 1940. Fue condenado a 20 años de guandoca que cumplió casi íntegros y murió en Cuba en 1978. Por lo tanto, cuando Sara estuvo en México el sufría las durísimas condiciones penitenciarias, lo que abre el interrogante de cómo se estableció ese fugaz noviazgo. También está por desvelarse la identidad y vida posterior de esa hija de la que tuvo noticia muchos años después.