San Marco_borrado
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Fallece, lo incineran y aparece vivo a los pocos días
Cuando el afectado se enteró de todo lo que había acontecido en torno a su supuesto fallecimiento, sólo pudo decir: "¡Qué voy a estar muerto, aquí sigo!"
Una familia mexicana se ha llevado un susto de fin al ver aparecer a un familiar vivito y coleando, después de haber muerto y de haber sido incinerado. Todo ocurrió cuando esta familia recibió la noticia de que el protagonista de esta historia se había escapado del centro de alcohólicos en el que se encontraba recluido y que la policía había encontrado su cuerpo en avanzado estado de descomposición.
La mujer del fallecido reconoció el cuerpo como el de su marido cuando le mostraron una serie de fotografías, aunque no estaba del todo convencida. “Nos mostraron una serie de fotografías y yo no creía. Mis hijos y un yerno tampoco estaban convencidos, sí se parecía a mi marido, pero no estábamos seguros, nos dijeron que nos iban a hacer el ADN y al final no nos hicieron nada”, cuenta la hija del supuestamente fallecido.
Y es que, según cuenta la familia, accedieron a identificar el cuerpo como el de Miguel Ángel Gomar Luna, porque le informaron de que el Ministerio Público lo haría por ellos, si no se decidían, perdiendo de este modo la oportunidad de reclamar el cuerpo. Una vez identificado por la familia, a la que no le quedó más remedio que hacerlo, procedieron a incinerarle.
Poco después, concretamente el pasado 24 de febrero, la familia recibió la noticia de que Miguel Ángel seguía vivo y que hasta ese momento había estado sobreviviendo en la calle pidiendo limosnas. Cuando el afectado se enteró de todo lo que había acontecido en torno a su supuesto fallecimiento, sólo pudo decir “¡Qué voy a estar muerto, aquí sigo!”.
Pero este caso no queda sólo en una anécdota que contar, puesto que ahora ésta desafortunada familia se enfrenta a un problema legal: devolver la identidad al cuerpo que incineraron.
Cuando el afectado se enteró de todo lo que había acontecido en torno a su supuesto fallecimiento, sólo pudo decir: "¡Qué voy a estar muerto, aquí sigo!"
Una familia mexicana se ha llevado un susto de fin al ver aparecer a un familiar vivito y coleando, después de haber muerto y de haber sido incinerado. Todo ocurrió cuando esta familia recibió la noticia de que el protagonista de esta historia se había escapado del centro de alcohólicos en el que se encontraba recluido y que la policía había encontrado su cuerpo en avanzado estado de descomposición.
La mujer del fallecido reconoció el cuerpo como el de su marido cuando le mostraron una serie de fotografías, aunque no estaba del todo convencida. “Nos mostraron una serie de fotografías y yo no creía. Mis hijos y un yerno tampoco estaban convencidos, sí se parecía a mi marido, pero no estábamos seguros, nos dijeron que nos iban a hacer el ADN y al final no nos hicieron nada”, cuenta la hija del supuestamente fallecido.
Y es que, según cuenta la familia, accedieron a identificar el cuerpo como el de Miguel Ángel Gomar Luna, porque le informaron de que el Ministerio Público lo haría por ellos, si no se decidían, perdiendo de este modo la oportunidad de reclamar el cuerpo. Una vez identificado por la familia, a la que no le quedó más remedio que hacerlo, procedieron a incinerarle.
Poco después, concretamente el pasado 24 de febrero, la familia recibió la noticia de que Miguel Ángel seguía vivo y que hasta ese momento había estado sobreviviendo en la calle pidiendo limosnas. Cuando el afectado se enteró de todo lo que había acontecido en torno a su supuesto fallecimiento, sólo pudo decir “¡Qué voy a estar muerto, aquí sigo!”.
Pero este caso no queda sólo en una anécdota que contar, puesto que ahora ésta desafortunada familia se enfrenta a un problema legal: devolver la identidad al cuerpo que incineraron.
