El Vaticano toma una decisión histórica y permitirá a los sacerdotes bendecir parejas gayses o divorciados vueltos a casar

Franz. Liszt dijo:

Eso segun la teología berggliana. No hay precedente


Cardenal Müller sobre 'Fiducia supplicans': «La única bendición de la progenitora Iglesia es la verdad que nos hará libres»

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Infovaticana, ha aclarado que no se está permitiendo bendecir a la unión, sino a la pareja, pero esto es jugar con los conceptos, pues la pareja se define precisamente por su unión.
una pareja se define por su unión emocional o afectiva, no por las veces al día / semana / año que practican el sesso juntos o por separado. El cardenal Muller pertenece a ese sector de la IC obsesionada con el sesso.

se alega que en la relación hay elementos positivos, y que estos pueden bendecirse, pero estos elementos positivos (por ejemplo, que se ayude a la otra persona en una enfermedad) son accidentales a la relación misma, cuya naturaleza es compartir la sexualidad
el ayudarse el uno al otro noooo es en absoluto "accidental" a la relación sino que es LA BASE misma de una relación de pareja y la prueba es la cantidad de matrimonios católicos que no practican el sesso juntos o lo practican muy de vez en cuando (o algo más a menudo pero por separado) y siguen juntos.

Precisamente la gente sencilla, a la que el documento quiere favorecer fomentando la piedad popular, es la más vulnerable a ser engañada por un signo que contradice la doctrina, pues capta intuitivamente el contenido doctrinal del signo.
de nuevo, estamos ante la obsesión por el sesso. No veo que este sector de la IC tenga problema alguno con la piedad popular a la hora de repartir estampitas y astillas inventadas de la cruz de cristo a modo de amuletos.

mientras el Papa Francisco siga afirmando que las uniones gayses son siempre contrarias a la Ley de Dios, está afirmando implícitamente que tales bendiciones no se pueden dar.
es que la bendición no se está dando a una relación sensual sino a una relación entre dos personas. Que esa pareja o la otra esté en situación de pecado por este mandamiento o el otro es accidental. Cuando un sacerdote bendice una pareja que ha matrimoniado con la finalidad de acumular propiedades, títulos nobiliarios, dignidades varias, no esta bendiciendo la avaricia sino todo aquello de bueno o evangélico que pueda existir en esa pareja. De nuevo, el cardenal Muller se fija solo el sexto mandamiento porque es la OBSESION de cierto sector de la IC.

Esto significaría que el sacerdote tendría que dar estas bendiciones sin actuar en nombre de Cristo y de la Iglesia. Pero esto implicaría no actuar como sacerdote.
¿Y?

Esto es muy distinto que señalarles con signos y palabras autoinventados pero engañosos que Dios no es tan exigente con el pecado, ocultando así que el pecado de pensamiento, palabra y obra nos aleja de Dios. No hay bendición no sólo en lo público, sino tampoco en lo privado, para condiciones de vida pecaminosas que contradicen objetivamente la santa voluntad de Dios.
Una bendición popular vs una bendición litúrgica o "formal" no pretende ocultar ni absolver condiciones de vida pecaminosas sino bendecir todo lo que haya de evangélico en la interacción del hombre con su entorno., interacción que no se reduce al sesso, que vaya OBSESION tiene con el sesso el señor cardenal.

Xanna dijo:

sigue leyendo y luego me contestas.

PS
entiendo que el documento permite que no OBLIGA.

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Es que no has leído el documento, reconócelo. La regularización de esta maldición (no bendición) se ha hecho de manera tan malvada y torticera que a la vez que margina a los gayses (y a las parejas irregulares) excluyéndolos del resto de la comunidad de fieles, les induce a seguir en el pecado mortal para llegar a la condenación eterna.

Los margina porque en el documento especifica que no debe haber ningún rito (o forma) a la hora de maldecirlos, que esa maldición tampoco puede ser en público, es decir, durante la "liturgia" o como sacramento. Y los condena porque es una maldición que se realiza a una pareja cuando, por lo que dice el propio documento, esa bendición debería de ser del sacerdote al fiel con propósito de enmienda, no del sacerdote a la pareja que vive en pecado. Y ojo, que esto se aplica no sólo a las parejas gayses sino también a las irregulares, es decir, aquellas que conviven sin estar casadas por la Iglesia, o que han sido casados solamente por la municipalidad. También deberían incluirse los divorciados vueltos a "casar", pero eso es otra pachamamonada.

31- (...) En estos casos, se imparte una bendición que no sólo tiene un valor ascendente, sino que es también la invocación de una bendición descendente del mismo Dios sobre aquellos que, reconociéndose desamparados y necesitados de su ayuda, no pretenden la legitimidad de su propio status, sino que ruegan que todo lo que hay de verdadero, bueno y humanamente válido en sus vidas y relaciones, sea investido, santificado y elevado por la presencia del Espíritu Santo. (...)

Como cualquiera con dos dedos de frente y atendiendo a la mínima razón deduciría, esta bendición debería tener un carácter individual (como hasta ahora), porque al hacerla en pareja irregular (pecaminosa) se está "bendiciendo" el pecado que el propio documento "admite" pero a la vez "bendice", repito: "reconociéndose desamparados y necesitados de su ayuda". ¿Les bendice para que sigan desamparados y necesitados de su ayuda? NO TIENE SENTIDO.

gayses, no se os está legitimando, no se os está aplaudiendo, no se os está haciendo un "borrón y cuenta nueva", no se os está permitiendo que sigáis como hasta ahora; se os está señalando, se os está marginando. Y antes de que se les vislumbre la sonrisilla a los pachamamones aclaro: a los gayses y a las parejas irregulares se os está engañando para maldeciros e induciros definitivamente a la condenación eterna, como ya hicieron con los divorciados vueltos a casar. ¿Qué otro sentido tendría sino esta maldición disfrazada de "bendición" al hacerla en tales parejas. ¿La castidad? Ya deberiais saber que la castidad se busca alejándose del pecado, no acercándose a él y arriesgándose en todo momento a la tentación de caer en él.

Luego está la segunda parte, que muchos chamancillos de la secta conciliar van a hacer lo que les salga de la rabadilla en sus tribus. Harán estás maldiciones públicamente, las incluirán en la liturgia, "bendecirán" el pecado e inducirán a seguir pecando. Nada raro, eso lo llevan haciendo desde hace 40 años, y no pasará absolutamente nada; tenemos ya por seguro que eso no va a ser vigilado ni castigado.

Cualquiera que entienda esto se dará cuenta de que esto es más obra de satanás que de Dios.

Por otra parte el documento "obliga". Si conocieras a la secta conciliar está claro que el documento obliga:

35. Por lo tanto, la sensibilidad pastoral de los ministros ordenados debería educarse, también, para realizar espontáneamente bendiciones que no se encuentran en el Bendicional.

Es obvio que a quienes aún les quede algo de sacerdote y se nieguen a realizar esta maldición se arriesgarán a ser marginados exiliándolos a parroquias de quinta, en pueblecitos perdidos en los que sobreviven 5 ancianos, porque eso es lo que ha hecho desde que existe la secta conciliar con quienes no acatan sus abusos.