Prometheo
Madmaxista
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Lo cuenta Norman Ohler en su libro Der totale Rausch (La borrachera total: Las drojas en el III Reich Hitler) donde señala que los nazis eran grandes consumidores de anfetaminas y opiáceos. Está todo documentado gracias a los registros que llevó a cabo el médico personal de Hitler Theodor Morell..quien chutó al Fuhrer nada menos que 800 inyecciones, solamente en los últimos años
Según Ohler, muchos de los integrantes del Partido nancy tomaban drojas en diversas proporciones. Algunos más que otros. Los había adictos a las metanfetaminas como Ernst Udet. A otros les pirraban los anestésicos potentes como era el caso del travesti Göring...más conocido como "Móring" debido a su afición a la morfina. Mientras que el del bigote, Hitler, tenía predilección por el Eukodal, un opiáceo sintético que tomaba por vía intravenosa.
Morell, el médico de Hitler, registró extensamente la drojadicción en el III Reich, en particular la de Hitler, que figura en el Archivo Federal de Koblenz, el Instituto de Historia Contemporánea de Munich y en el Archivo Nacional de Washington...Por tanto, es de total credibilidad.
La relación entre Morell y Hitler era tan estrecha que incluso no se le permitió a Morell ir al funeral por su hermano ya que Hitler necesitaba chutarse a diario...Ohler dice con sarcasmo que "todo el mundo sabe lo que se siente cuando el distribuidor está de vacaciones" :XX:
Los nazis no sólo experimentaron ellos mismos con las drojas sino que se las administraron a sus prisioneros. Por ejemplo, en el campo de concentración de Sachsenhausen los prisioneros fueron obligados a ingerir una droja "milagrosa" que que contenía altas dosis de cocaína, metanfetamina y Eukodal. Cabe decir que los estadounidenses copiaron los resultados de este experimento cuando liberaron el campo y las agencias de inteligencia de Estados Unidos utilizaron este material después en su "Proyecto Alcachofa", que tenía por objeto desenmascarar supuestos espías soviéticos.
Otro aspecto interesante de la drojacción en el III Reich fue que la Wehrmacht cuando invadió Polonia y Francia se les llamó a esas operaciones "Blitzkrieg", con un motivo: los soldados iban puestos hasta arriba de narcóticos. Se proporcionaron treinta y cinco millones de dosis de Pervitin para la campaña de Francia. El ingrediente activo en Pervitin es la metanfetamina. Las unidades de tanques fueron especialmente dopadas, mientras que pilotos de la Luftwaffe también tomaron metanfetamina. Se podría decir que la Blitzkrieg fue un Methkrieg, dice Ohler, haciendo un símil con Meth de metanfetamina.
