Desde las quiebras monetarias del 29 y de la burbuja.com, mucho se ha hablado de la necesidad de una regeneración económica a nivel mundial, y de la necesidad de una estabilidad monetaria que contribuya a paliar los desmanes provocados por la banca y por la ambición desmedida del sector privado. Ahora nace una supuesta nueva alternativa como lo es Bitcoin y sus acérrimos seguidores que no dudan en calificarlo como alternativa y símbolo de libertad. La realidad es que el Bitcoin ya ha sido cooptado por los grandes magnates globales tales como Black Rock y fondos bursátiles que siguen dominando el escenario económico por lo que ilusorio pretender que Bitcoin va a suponer una vía de escape para el ciudadano medio. El resultado será y está siendo que solo unos pocos acaparadores se beneficiarán de la egida monopolística que se perpetúa desde hace siglos y que constituye una oligarquía económica que sigue oprimiendo y por supuesto robando y empobreciendo.