A uno de forocarros se le aparece su abuela muerta y se convierte de ateo a creyente

Otro que ha perdido el miedo a la fin es Luis Miguel Domínguez, el naturalista popular por sus series televisivas (Amazonia última llamada, etc) y sus libros, que sufrió un severo ictus en mayo y estuvo 36 días en coma inducido. Cuenta su experiencia, muy similar a la del neurocirujano Eben Alexander, todos cuentan cosas parecidas y vuelven cambiados.

“Yo era agnóstico, pero esta experiencia me ha hecho creer en el alma”... “El coma me ha cambiado la vida para siempre, me he convertido en un ser muy peligroso, porque ya no le tengo miedo a la fin, ahora lo que temo es a la vida, y siento una responsabilidad enorme con mi mujer”.
Entrevistado hace unos días en el programa "Espacio en blanco", podcast aquí:

http://mvod.lvlt.rtve.es/resources/TE_OESPEBL/mp3/4/0/1571556023104.mp3

Lo más increíble y lamentable del hilo es la actitud cerril y soberbia de algunos católicos que quieren ser más papistas que el Papa. Si por ellos fuese habrían quemado en la hoguera a no pocos santos, místicos y Padres del desierto.

Que la iglesia católica no entre a explicar ciertas cuestiones metafísicas no niega que existan. Ya lo explicó Guénon, las religiones formales tienden a restringir o reducir la realidad metafísica para hacerla asumible y comprensible por los fieles. Su misión no es explicar lo no-humano sino salvar almas. Creo que es fácil de entender. Vosotros confundís metafísica con teología. Esto por un lado.

Por otro negar o decir que es demoníaco algo por ser "pagano" es propio de un fulastre, así de simple. Es evidente que culturas chamánicas tienen muchas más experiencia y sabiduría en conocer otros "mundos" o realidades como el mundo sutil.

Lo más curioso de esto es que como he dicho al principio los cristianos primitivos no habrían negado esta realidad, de hecho trabajaban con ella: desde la abundancia de comunicaciones en sueños hasta el mantenimiento de los ritos de "Incubatio" en algunos templos. Pero nada vosotros a lo vuestro, PURITANOS.

Un ejemplo clásico de sueño lúcido está en El peregrino ruso.