Ya es sabido por todos que los americanos en las guerras siempre fueron brutales, en Filipinas hicieron un genocidio para borrar el legado hispano, en la segunda guerra mundial se dedicaban a coleccionar huesos de japoneses, etc... Pero yo personalmente no tenia ni idea de que en Vietnam se les hubiera ido la pinza hasta el punto de apiolar y violar indiscriminadamente a civiles sin distinción de sesso ni edad. El episodio más sonado fue la masacre de My Lay, mataron a medio millar de inocentes, sin más.
Reportaje | "Mataban a todo el que veían"
El otro día he vuelto a ver la película "Soldado universal", el malo de la película es un sargento pirado, de la guerra de Vietnam. El sujeto en cuestión lleva un collar hecho de orejas humanas, yo fui lo suficientemente ingenuo para creer que se trataba de un elemento de la película para deshumanizar al villano. Pues no, parece que la practica de hacer collares con orejas humanas fue bastante común.
El historial de la "Tiger Force" es terrible. Los fieros soldados de la Tiger Force cortaron las orejas de sus víctimas en Vietnam y se hicieron collares con ellas. Violaron todas las leyes escritas y no escritas de la guerra. Los soldados se hacían collares con orejas humanas, unidas por el cordón de un zapato, y así entraban en los pueblos vietnamitas, proclamando su reino del terror y disparando contra todo lo que se movía.
Mataron y mutilaron a decenas de civiles indefensos. Violaron y degollaron a niñas de 13 años. Decapitaron bebés. Acribillaron a madres delante de sus hijos. De mayo a noviembre de 1967, el escuadrón más sanguinario de la División Aerotrasportada 101 -curtido para luchar y apiolar como un tigre en la jungla- convirtió las regiones de Quang Ngai y Quang Nam en un campo de exterminio donde todo estuvo permitido. A los soldados de la Tiger Force de les otorgaron medallas por sus méritos de guerra. El rosario de atrocidades de la temible Tiger Force permaneció en secreto hasta 1971, cuando el Pentágono abrió una investigación, comprobó la existencia de la menos 18 crímenes de guerra y elevó sus conclusiones a la Casa Blanca, que decidió dar carpetazo al asunto en 1974, por aquello de no reabrir las heridas aún sangrantes del Vietnam.