Personalmente no puedo entender que todo un presidente de un partido socialista obrero, tenga intereses familiares en los beneficios de empresas privadas.
Aunque solo sea por pura consecuencia o por las posibles dudas que genere su actividad. Es evidente que el SISTEMA ha vuelto a hackear al "partido de los desposeídos", el único presuntamente de izquierdas que quedaba en la oposición. Las puertas giratorias siempre acaban corrompiendo a los representantes de los trabajadores. Es lo que tiene el poder del dinero, de la economia de los Florentinos y sus ilustres epígonos.
Ojalá, lo digo con toda la pena, desaparezca el PSOE, y aparezca un partido que vuelva a aglutinar a la auténtica izquierda por más utópico que suene.
Mientras tanto, siempre nos quedará China, donde los millonarios son condenados a perpetua cuando no a la pena capital cuando te pasas de la raya.