Partiendo de que yo ya pensé desde el primer momento que el bichito había escapado del laboratorio famoso, también pienso que el hecho de que haya banderillas para controlarlo ha sido un acierto, la prueba es que las muertes por el bichito han bajado considerablemente, ahora bien, también pienso que la libertad de cada uno está por encima de los pensamientos que tenga el vecino, no me parece bien que se insulte como se hace aquí a los que se han medicado ni al contrario. Al final, creo que es un problema de educación y de respeto a los demás, en el fondo, todos llevamos un pequeño dictadorzuelo dentro.