Ishay_borrado
Guest
Me limité a desviar los golpes de mi agresor. Desvié 10 o 15 golpes (bastante torpes). Cuando el agresor se paró empecé (en guardia) a hablarle. Él me contestó -muy cabreado- y ya no hubo más golpes.
El pequeño matiz es que has pasado decenas de horas de entrenamiento defendiéndote de golpes mientras que tu rival había pasado 0. De ser esto al reves, el intentar apaciguar la situación con palabras habría significado que hubieras acabado en el hospital o muerto.