No es una cuestión de que el precio del crudo se denomine en dólares americanos (por supuesto) porque ese precio del crudo se puede denominar en iPhones, en kilogramos de aceitunas, o en litros de leche de cabra...
Bueno, no.
Usted puede expresar, para su uso interno, el precio del crudo en Euros, iPhones o paraguas. Sin embargo en los contratos, que implican dos partes, la denominación no es irrelevante.
Este es el motivo por el que un préstamo de un millón de dólares no es lo mismo que un préstamo en euros por valor de un millón de dólares. Lo primero es deuda denominada en dólares y lo segundo deuda denominada en euros.
Del mismo modo que las acciones del Ibex están denominadas en Euros, los contratos de crudo están denominados en dólares.
Si, pongamos por caso, un productor kuwaiti de crudo vende futuros de petróleo para entrega en Abril de 2018, por valor de 100 millones de dólares a 25 dólares el barril, el dolar, el que este contrato esté denominado el dólares no es irrelevante.
Ese contrato de futuro, obliga a ese productor a entregar en Abril de 2018 4 millones de barriles y le da derecho a recibir 100 millones de dólares por esa entrega.
Aquí, en este contrato, la obligación de quien compra ese futuro es la obligación de pagar 25 dólares por barril, no 25 euros, 25 iPhones o el número de dólares que en esa fecha sean 25 euros.
Un comprador o vendedor de crudo que quiera fijar el precio en Euros o en Esterlinas una entrega futura de crudo, debe comprar o vender un futuro de crudo, denominado en dólares y también vende o comprar un futuro del Euro o la Esterlina.
El uso combinado de estos dos futuros: uno que fija el precio del crudo en una compra futura y el otro que fija el precio del dólar en euros en una compra futura, permiten fijar en Euros el precio de una compra futura de crudo.
La cuestión es que el que quiera comprar crudo necesita antes conseguir US$.
No, en realidad no. Esto es un mito.
Si se usan futuros denominados en dólares, que no es obligatorio, el precio acordado de antemano para la tras*acción está estipulado en dólares en el contrato. Sin embargo, el pago de la tras*acción puede hacerse en cualquier otra moneda.
Un vendedor árabe puede aceptar el pago en Euros a una petrolera francesa siempre que el número de euros el día de la entrega corresponda al número de dólares que figuró en el contrato de futuro.
Si el precio del crudo se denominara en unas cantidades de litros de leche de cabra (y no en US$), y se impusiera su comercio en esa "divisa", quienes quisieran comerciar necesitarían conseguir litros de leche de cabra, y por lo tanto los cabreros (quienes tengan el "monopolio" o control sobre las cabras) tendrán un beneficio de ese control.
El US$ lo imprimen en exclusiva quienes lo imprimen (y sin ninguna reserva de valor que lo respalde desde la noche del 15 de agosto 1971... aunque ya venga de antes), y dándole a un botón.
Los cabreros, al menos se lo curran, y los litros de leche son limitados a su esfuerzo, trabajo, y otras variables... a diferencia del US$ fiduciario de hoy (no del US$ con referencia al oro).
Ud nos puede decir que si el precio del crudo se denomina en US$ no da ventaja a quienes lo imprimen, pero lo que sí da ventaja es que sea condición necesaria utilizar el US$ para su comercio.
No, parte de una premisa falsa.
El que los futuros de petróleo estén denominados en dólares no implica que hagan falta dólares para comprar petróleo.
Los contratos incluyen ciertas unidades en sus cláusulas. Los contratos de futuros de crudo incluyen ciertas fechas de entrega, Abril de 2017, que estén denominadas en una unidad concreta y otras unidades como el barril o el dolar que también están denominadas en unidades concretas.
El que la unidad monetaria que se usa sea el dólar no implica que el pago deba hacerse en dólares.
España, por ejemplo, es un gran importador de petróleo y todo el petróleo que compra la economía española lo paga el euros, antes en Pesetas.
Lo único que hace de una divisa la divisa hegemónica es la deuda.
En el mundo hay ingentes cantidades de deuda denominada en dólares pero muy poca deuda denominada en rublos, por ejemplo. Esta es una cuestión de confianza y proviene de la Historia.
Por ejemplo: cuando Felipe González necesitaba emitir deuda para obtener la financiación de su despilfarro de inversores extranjeros, podía emitir esos bonos denominados en Pesetas o denominados en dólares (o marcos alemanes)
Si el fondo de inversión extranjero prestaba a Felipe González 100 millones de dólares, recibiría 10 años después 100 millones de dólares o si prestaban 100 millones de Pesetas recibirían 100 millones de Pesetas.
Todos los fondos preferían los bonos denominados en dólares y ninguno aceptaba los bonos denominados en Pesetas. ¿Puede usted intuir por qué?
Cuando una compañía rusa obtiene financiación de, por ejemplo, un fondo de inversión japonés, la deuda se denomina el dólares, no en rublos.
Esto no impide que la entrega del dinero se haga el rublos o yenes y la devolución futura de la deuda se haga también en rublos o yenes, sin embargo, la denominación de la deuda se hace el dólares.
Lo que ese fondo japonés no acepta es recuperar 100 millones de rublos dentro de 10 años a cambio de prestar 100 millones de rublos hoy, y no lo acepta porque un rublo dentro de 10 años podría valer la décima parte que un rublo hoy.
Lo que sí aceptará ese fondo es prestar rublos por valor de 100 millones de dólares actuales y recuperar en 10 años rublos futuros por valor de 100 millones entonces.
---------- Post added 09-sep-2017 at 15:49 ----------
Esa tesis no es ni mucho menos exclusiva de los que usted llama "los intelectuales de izquierdas analfabetos en economía".
Claro que si, que el hecho de poder imprimir infinitos dólares respaldados por nada (aparte de la propia economía estadounidense y su aparato militar), no les da ventaja para comprar petróleo en dólares. Claro, claro.. Básicamente es como si lo obtiviesen gratis, a cambio de devaluar su moneda exportando su inflación por la fuerza.
Este meme de la izquierda le parecerá a usted obvio pero de hecho es falso.
El Banco Central norteamericano puede imprimir infinitos dólares lo mismo que el Banco Central japonés puede imprimir infinitos yenes, el Banco Central noruego puede imprimir infinitas coronas, el Banco Central argentino puede imprimir infinitos pesos o el Banco Central de la India puede imprimir infinitas rupias.
No hay diferencias en esto.
La compra de petróleo puede pagarse en coronas noruegas, yenes o rupias y si el vendedor no las acepta, con las rupias pueden comprarse dólares y con los dólares comprarse el crudo.
Si, según la teoría naif de los asesores de izquierdas, los USA pueden imprimir infinitos dólares con los que comprar petróleo gratis, la India puede imprimir infinitas rupias con las que comprar infinitos dólares con los que comprar petróleo gratis.
Esta teoría simplemente no tiene ningún sentido y proviene de un completo desconocimiento de lo que es el dinero o de lo que significa emitir (imprimir) dinero que padecen los analistas de izquierdas. Para un intelectual de izquierdas el dinero es solo un talismán mágico de funcionamiento incomprensible que permite adquirir poder.
Cuando la India, Venezuela o Argentina imprimen demasiadas rupias, bolívares o pesos, el resultado es la destrucción del valor de esas monedas, lo que limita la libertad para esa impresión infinita.
No les ocurre lo mismo a Eurolandia, Japón o USA.
El sueño dorado de Bernanke o Draghi sería reducir el valor del dólar o del Euro pero no lo consiguen, y lo que es peor, no saben qué es lo que no funciona.
El Gobierno de Japón lleva 20 años tratando de lograr la milésima parte de inflación de la que Maduro logra en una semana imprimiendo bolívares y llevan 20 años sin lograrlo. El yen no se deprecia, por mucho que lo intentan.
Esto está relacionado con la deuda, el dinero es solo una representación de la deuda, de la deuda que esté denominada en esa moneda.
En el mundo hay una cantidad ingente de deuda viva denominada en Yenes, Dólares o Euros, lo que hace que los Bernankes y Draghis del mundo sean incapaces de devaluar el dólar o el Euro como sueñan con hacer. Esa ingente deuda les impide "imprimir" nuevo dinero (no hay demanda, nadie quiere los nuevos Yenes, Dólares o Euros recién impresos)
Si el Gobierno de Venezuela, el de Argentina o el de Rusia pueden trivialmente devaluar sus monedas generando inflación del 45% anual a base de imprimir bolívares, pesos o rublos es simplemente porque no hay en el mundo deuda denominada en esas monedas.
Y no hay en el mundo deuda denominada en esas monedas no porque no haya gente interesada en endeudarse en esas monedas sino porque no hay ahorradores interesados en prestar en esas monedas.
Un ahorrador medio confía en que, peor o mejor, los dólares, euros o yenes que recupere en el futuro tendrán algo de valor, mientras sabe que los rublos, pesos o bolívares que podría recuperar tendrían un valor cero.
Históricamente, países como USA, Alemania, Japón o Suiza han tendido a cumplir sus promesas y a respetar sus contratos lo que hace que en un mundo sumido en la deflación haga imposible devaluar los dólares, los euros (marcos alemanes), yenes o francos suizos.