Últimos veteranos de la Guerra Civil Española

Al mio de ninho le preguntaba si el habia pegado algun tiro y siempre evadia la respuesta... Le metieron un balazo que le rozo la sien y le mando al hospital. 2 cm mas a la izquierda y la palma.
me dijo que estuvo en zapadores, y ya de mayor lei lo que hacian y era una fruta cosa. Siempre en primera linea. Todo el dia cabando, haciendo minas, y por supuesto, su tiempo libre a pegar tiros (apiolar o morir).
Para que luego los traumatizaditos de la quinta de Carmen alopécico y cia vengan a predicarnos

Vaya hombre, menuda frutada. Es que a día de hoy la gente no sabe estás cosas. Estoy seguro que los más punteados de la guerra fueron los de la Quinta del Biberón. Críos, la mayoría analfabetos y campesinos que no tenían ni fruta idea de política se les obliga a comerse toda la guerra para luego meterles en campos o como en el caso de mi abuelo hacer cinco años de mili y acabar volviendo a casa con veintitantos años.
 
Los de la quinta del biberón tienen casi 100 años. La única abuela viva que me queda nació en 1928 y tenía 8 años cuando estalló la guerra. Imaginaos los niños soldado, que tenían 14 años como mínimo, es decir, que tienen 98 años como poco.

En fin, espero que cuando no quede nadie vivo hablar de la Guerra Civil Española para hacer política sea tan ridículo como hablar de las guerras carlistas o la guerra del Rif.
 
El mío materno ,murió hace unos pocos años con noventa y muchos años. Era de Burgos, nunca quiso contarnos nada de la guerra. Solo se por mi ama, que un día llegaron a su pueblo los franquistas, cogieron al alcalde, al juez, al maestro, a las fuerzas vivas del pueblo que pudieron (que eran todos republicanos) y los fusilaron. A los hombres en edad militar los alistaron a la fuerza y hala, al frente. Se que estuvo por Madrid (Guadarrama) y Aragón (frente del Ebro supongo). En su casa recuerdo que tenia un pequeño marco acristalado con 8 medallitas, pero nunca supe porque se las dieron, ah! y se que le hirieron 2 veces, un balazo en el pandero y otro en un brazo.
 
Los de la quinta del biberón tienen casi 100 años. La única abuela viva que me queda nació en 1928 y tenía 8 años cuando estalló la guerra. Imaginaos los niños soldado, que tenían 14 años como mínimo, es decir, que tienen 98 años como poco.

En fin, espero que cuando no quede nadie vivo hablar de la Guerra Civil Española para hacer política sea tan ridículo como hablar de las guerras carlistas o la guerra del Rif.

Para mi, sin duda alguna, fueron los mas puteados de la guerra.
 
Del bando republicano habrá alguno más por la afición que tenían los Señores de la Guerra del Frente Popular a emplear a niños-soldado, como hacen ahora las tribus africanas.
Por edad y entorno he tenido la gran suerte de tratar con veteranos de algunas guerras y la verdad que es interesante, aunque en general hay -había- que tirarles de la lengua y/o emborracharlos.
Efectivamente, mi abuelo fue combatiente y yo de niño siempre le decía que me contase chascarrillos de la guerra. Él siempre me decía que fue obligado, que se comió casi 5 años entre la mili y la guerra pues le pilló el inicio haciendo la mili. Y yo siempre le preguntaba que si mató a alguien y me decía que no, que él disparaba pero no sabía si mató a alguien. Y que no se podía negar porque lo mataban sus superiores. De hecho me comentó que vio una ejecución por no estar dispuesto un compañero de la mili a sumarse al alzamiento.
También que los jovenlandeses eran muy guarros y los gente de izquierdas muy desorganizados y por eso perdieron la guerra. Pero nunca me concretó nada de combates, de compañeros muertos en acción ni nada. En eso era muy parco.
 
Uno de mis abuelos lo pillo haciendo la mili, le toco ser cocinero, y mato a millones de burros de un martillazo para los ranchos, el otro se libró, ya que era huérfano de padre. Pero el hermano de mi abuela si que tubo una guerra larga, lucho con los republicanos por que les toco por zona geográfica, estuvo toda la guerra hasta el final, fue curioso que estuvo en la zona de Castellón y hasta en mi propio pueblo luchando, un día lo vio tan mal que se vistió de monja y se piró a Francia, tan mal fue la cosa que cuando volvió al cabo de unos años a su pueblo su novia se casaba con otro, lo dejo y se casó con el, era lo decente.
Me contó que a lo último mandaron niños al frente, con la cabeza llena de ideología pero que no sabían luchar una cosa, que morían como chinches frente a tropas como las jovenlandesas, fueron momentos de sacrificio inútil, frente a sus lideres se marchaban a Francia con todo el dinero, muy típico de la izquierda.
 
Recuerdo que mi abuelo materno contaba que estuvo en la guerra, pero poco más decía, ya que lo pasó muy mal, estuvo prisionero en León, creo, y volvió medio muerto, pero como nunca se metió en política ni nada, lo dejaron tranquilo.
 
Eliseo fué el veterano de la Guerra Civil que dejó una huella en mi vida.

Cuando conocí a Elíseo ya rondaba los 80 años y yo aún iba al colegio. Vivía sólo en una avejentada casa cercana a mi escuela, por lo que mis padres,que tenían un restaurante, me encomendaron la tarea de llevarle la comida en una tartera metalica, dentro de una bolsa verde y roja de alambre.

Cada mediodía, despues de comer en el comedor de nuestro restaurante, recogía el mandado y se lo llevaba a Seo antes de retomar esas 2 horas de clase de tarde que le restaban a mi jornada escolar.

Muchos días que iba con tiempo y trás coger confianza, me enseñaba juegos de alambres y madera o me contaba historias y fabulas, que sabía que me chiflaban. Le recuerdo siempre con papeles llenos de números, haciendo divisiones de números de 12 cifras solo por "mantener la cabeza despierta neno".

Muchas veces sus fabulas y las recreaciones de aquellas historias añejas ganaron tanto mi interés que perdí la noción de la hora y ya no acudí al colegio. Quiero creer que esos días ganamos las batallas juntos.

Tenía un corpachón, una voz rasposa, formas educadas y calmadas, aspecto austero y mirada amable.

Me repetía como un mantra, "Estudia neno y sé curioso, porqué un medico puede barrer, pero un barrendero no va a operar". Y vuelta a las leyendas y mitologías que mezclaba con batallas de una guerra que siempre me dejó claro que fué absurda.

Recuerdo su casa desvecinjada, una puerta de madera verde, con una cuerda que desde afuera abría el pasador. Periodicos apilados en el pasillo de entrada y una sala de estar sin televisión.

Rara vez le ví abandonar su butacón, se movía con gran dificultad y gesticulaba mientras me contaba esas historias, casi siempre de picarescas y situaciones que rozaban lo absurdo, de supervivencia que estarían ligadas a un buscón en los años de la guerra.
Algunas pude distinguirlas años después, recogidas en un libro que reabrió viejas heridas en mi valle (o quizas las cerró) <Los que se echaron al monte> se llamaba y fué un exito de ventas en el terruño.

Es curioso como en las historias de Seo, los malos y los buenos no estaban tan claros, se difuminaban más que en el libro que leí años después, en el cuál me sorprendió leer historias muy crueles que me tocaban más de cerca de lo que imaginaba hasta que investigué en mi casa.
A todos nos tocó una herencia de rencores o silencios heredados que se acrecentan en los pueblos y creo que los más pequeños deben desprenderse, si quieren crecer libres de esas cargas.

Y lo curioso es que recuerdo a Seo como una suerte de Wido, contando una fabula a un niño con migajas de crueles realidades entre lo absurdo de una guerra. Pero siempre con un mensaje de busqueda de tu camino con perdón y comprensión.

Mientras iba a diario durante años antes y después del colegio, para recoger los envases, nunca ví a nadie mas que Seo en la casa (aunque sé que sus familiares nos pagaban el servicio diario de comidas).
Supongo que intentaba cautivarme con sus historias y juegos y así mitigar la soledad. Aquellas visitas de ratucos (las más) y las visitas que derivaban en peyas (las pocas aunque gloriosas) quedaron atrás.

Pocos años después, estando yo en el instituto, Seo falleció. Su casa sigue igual,deshabitada, desconchada la pintura exterior y sin reformar. El terrenuco que tenía la casa está cuidado por un sobrino que tiene animales.

Al ver este hilo me ha venido a la mente su recuerdo y siento que compartir su memoria es un homenaje escaso a tantos que como Seo, nos dieron testimonios de sus versiones de primera mano. Lejos de lo que la historia nos "enseña"...realidades que hoy, se me antojan mas vigentes que nunca.

Desde esté rincón, mi pequeño homenaje para mi pequeño heroe, que desde su butacón a modo de escenario, dejó una huella en aquel niño que yo fuí.

Gracias Seo
 
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Uno de mis tios abuelo le tocó la guerra en Asturias pero pudo marchar al exilio, en Francia estuvo en un campo de prisioneros donde estuvo a punto de palmarla de hambre y enfermedades

No sabemos exactamente que hizo en Francia pero un día apareció en el pueblo y siguió su vida normal hasta que un día unos años mas tarde apareció una francesa preguntando por él Mi tía abuela la hecho de la casa a garrotazos, menuda mala leche tenía
 
Mi abuelos estuvieron allí, uno en artillería y otro en la legión, no recuerdo exactamente en donde pero hablaban de su llegada a Asturias donde les recibieron como héroes, de Guadalajara y de Teruel. De que comían mejor que los civiles y de cuando volvían a casa de permiso venían llenos de piojos y chinches. Contaba el que estuvo en artillería le faltó poco para palmarla cuando reventó un cañón a pocos metros de su posición, que volvió a casa justo cuando nació mi tía y que alargó el permiso por su cuenta y riesgo, la guardia civil fue a buscarle a casa por desertor y luego, al explicar lo sucedido ante sus superiores, le dieron varios días más para cuidar a mi abuela. Recuerdo, cuando yo era niño, que muchas veces se quedaba en blanco, mirando fijamente a un punto pero con la mirada perdida en el infinito, como reviviendo aquella experiencia.

El otro que casi le dan matarile de un disparo desde la trinchera de los gente de izquierdas (creo que en Teruel), que respondió al fuego y que estaba seguro de haber hecho blanco, que usaban los neumáticos de los coches para reemplazar las suelas de las botas y que una vez casi se carga a uno de sus superiores , un sargento, en una trifulca. Resultó herido en combate pero la verdad es que no recuerdo haberle preguntado nunca cómo ni dónde sucedió.
 
Mi abuelo materno fue asesinado pro los de derechass, su historia es para llorar de verdad. El cura que le confesó el día que le comunicaron su condena a fin le dijo a mi progenitora 20 años después en una visita que le hizo a mi casa que con su padre habían hecho una gran injusticia

De mi otro abuelo paterno npi pero era franquista y médico no creo que matara a nadie
 
Mi bisabuelo paterno murió en la batalla del Ebro al lado del bando nacional, dejando huérfano a mi abuelo, que solo siendo un crió tuvo que ganarse la vida solo, y a mi bisabuelo materno creo que lo encarcelaron por comunista ya cuando acabo todo, mi abuelo lo iba a visitar a guandoca de vez en cuando, aparte de que los nacionales les expropiaron la granja que tenían por aquel entonces.
 
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