OYeah
Madmaxista
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Bueno, pues este no es un hilo de desahogo sin más, sino que quisiera que alguien me recomendara técnicas para no acabar gritándole a una desgraciada que se rasca el papo y se cree con autoridad para mandarte cuando deberian dar las gracias por lo que hacemos por ellas. No es una sola, en general las mujeres en mi trabajo no valoran que somos nosotros los que subimos las maletas y aparcamos los coches.
Hace un par de dias una chavala en una tras*it enorme tuvo un ataque de nervios porque se veia incapaz de sacar la furgoneta del parking. Llorera, salió de la furgoneta, drama, trauma, etc... Bien, la tuve que sacar yo, por supuesto.
¿Hay que subir maletas a donde no llega el ascensor? Por supuesto los iluso que ganamos lo mismo que ellas.
Y es esa soberbia de no dar ni las gracias... Llega un momento en que te carga ese tratamiento.
Y en cuanto a los pagapensiones de la selva, para qué hablar... Es que prefiero no hablar, están tomando la isla y llegando con certificados de cosa, no tienen ni fruta idea de nada ni la más elemental higiene.... Es un puñetero ****** el enseñarles. Dan ganas de darles de palos a veces, a ver si espabilan.
Porque si fueran pagapensiones que admiraras, que fueran inteligentes, pues todavia lo toleraria más. A todos nos apetece estar con gente inteligente. ¿Pero estos puñeteros indios de la selva, hijos de cortesana que no tienen la más elemental lógica de lo que es trabajar en un restaurante?
Estoy a punto de mandarlos a la cosa a todos. Hay un ABUSO del hombre blanco europeo que se hace mucho más duro de llevar que el trabajo.
Hace un par de dias una chavala en una tras*it enorme tuvo un ataque de nervios porque se veia incapaz de sacar la furgoneta del parking. Llorera, salió de la furgoneta, drama, trauma, etc... Bien, la tuve que sacar yo, por supuesto.
¿Hay que subir maletas a donde no llega el ascensor? Por supuesto los iluso que ganamos lo mismo que ellas.
Y es esa soberbia de no dar ni las gracias... Llega un momento en que te carga ese tratamiento.
Y en cuanto a los pagapensiones de la selva, para qué hablar... Es que prefiero no hablar, están tomando la isla y llegando con certificados de cosa, no tienen ni fruta idea de nada ni la más elemental higiene.... Es un puñetero ****** el enseñarles. Dan ganas de darles de palos a veces, a ver si espabilan.
Porque si fueran pagapensiones que admiraras, que fueran inteligentes, pues todavia lo toleraria más. A todos nos apetece estar con gente inteligente. ¿Pero estos puñeteros indios de la selva, hijos de cortesana que no tienen la más elemental lógica de lo que es trabajar en un restaurante?
Estoy a punto de mandarlos a la cosa a todos. Hay un ABUSO del hombre blanco europeo que se hace mucho más duro de llevar que el trabajo.
