El problema de no responder ante las faltas de respeto es que el enemigo siempre se crece, por eso hay que pararle los pies cuanto antes para EVITAR daños mayores para todos. Es un mal menor que hay que aceptar para lograr un bien mayor.
La violencia física es indispensable, la mayoría de personas en algún momento de su vida necesita un correctivo para aprender alguna lección, es un paso indispensable y debe ser ejecutado de forma aséptica y proporcional al daño causado.
En este caso, al autor del mismo y de los que lo aplauden, una sesión paloterapica con crujiente de madera y aroma de la India durante 5 minutos en dorsales, gluteos, femorales e isquiotibiales solucionaría el problema.
El español actual ha perdido en general el sentido del pudor y del respeto por eso hay que inculcarselo de nuevo para que la elegancia, el saber estar y la educación exquisita sea la norma, y no la excepción.
Y eso que no soy católico practicante ni la religión sea algo que ocupe ni un segundo mi día a día pero las creencias de los demás hay que respetarlas, no hace falta mofarse ni humillarlas de modo alguno.
