Que una peruana, con lo que saben en su país de origen sobre el valor de un piso, cometiera la boludez de meterse en una cipoteca por 240 mil leuros en Ejpaña, demuestra que hicieron bien en concederle la nacionalidad ejpañola. Tiene las neuronas del país en el que, queda más que acreditado, está plenamente integrada, cipotecándose en Chipoteca de Once Varas, como uno más de los nacidos aquí.
A esta en su pais no le hubiera pssado esto simplemente por que en su pais nada mas verla entrar en la oficina bancaria habria salido cogida del brazo por el vigilante y puesta inmediatamente en la calle ,y sihubiera gritado ,hubiera salido rodando por las escaleras