Yo escribí aquel post hace más de 8 años. Eso ha pasado al acerbo popular, parece.
Y no pasa absolutamente nada.
Lo curioso (por denominarlo de alguna forma) es que ni en Vice, ni la famosa Twittera, ni éste artículo de Yass (
"Los trolls me llaman Charo": lo que están diciendo realmente los que usan este nuevo 'insulto machista' ) parecen saber bien qué es el concepto, en qué se fundamenta, y a qué hace referencia.
Ahora resulta que "Charo" es un insulto en forma de meme de misóginos de extrema derecha pro-trump (la célebre alt right).
Cuando abrí aquel hilo lo hice para definir un tipo muy claro y muy abundante de funcionaria altiva, borde y vaga que todos nosotros conocemos.
Una coña, una broma, un pasatiempo.
Ahora el personal parece indignadísimo y hablan de caricias mentales citando a Dawkins y a Jüng.
Y Trump que no falte.
¿En serio no hay cosas más importantes en éste mundo que estar indignados en twitter por ésta chorrada?
Pues llegan tarde. Charo es de todo el mundo, y cuando uno escribe (aunque sea una chorrada) no puede evitar que cada cual use los términos como les de la gana, los retuerzan, los amplien, los odien, los amen, o los usen para hacer bromas y chascarrillos.
Más de la mitad de quienes dicen #JeSuisCharo no han entendido nada de nada.
Y no están sucritas al Venca, ni fuman nobel, ni son si quiera interinas.
Y os dejo un momento, que voy a ver si me ha llegado ya el cheque de Vox, Trump, y la Alt-Right húngara mala malosa.