luisgarciaredondo
Madmaxista
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A ver solo voy a intervenir porque una vez más la gente pierde la perspectiva y no se da cuenta en realidad de lo que está hablando.
"El beso, el beso, el beso...." "Que disparate y que locura...." etc... etc....
Señores que esto no va de un beso. Es una campaña masiva de PROPAGANDA, apoyada por casi todos los medios, debidamente sobornados por el gobierno para imponer UNA DETERMINADA PERCEPCIÓN DE LA REALIDAD y una determinada ideología, pura ingeniería social. Apoyada desde la trastienda por el PP y toda clase de paniguados en su entorno, que ya se rindieron ante este nuevo orden con armas y bagajes hace años sin haber pegado un solo tiro. Es por eso que este tema no cae en el más absoluto de los ridículos o esperpento. Porque lo mantienen vigente y actual desde el poder con unos fines muy concretos.
Y es así, porque además la mal llamada justicia colabora activamente. Siendo que está camino de ser completamente infiltrada por la izquierda totalitaria, como ya hicieron con la educación, la justicia, la administración y tantas otras cosas. Señores lean a Gramsci.
No es más que otro de los síntomas evidentes de que vamos, si no lo somos ya, hacia un estado totalitario. NO AUTORITARIO, como pudo serlo el franquismo o el antiguo régimen. Sino algo que va mucho más allá.
Y esto es cada vez más evidente que no se va a arreglar por las buenas. Pese a que todavía existan ciertos conatos de resistencia civil, como VOX, parece cada vez más evidente que este partido no puede con lo que tiene en frente. El monstruo ya es demasiado poderoso y lo abarca todo.
Y el enemigo no es el Viruelo, o el juez, o la fruta feminista de turno. El enemigo lo tienes al lado, en tu trabajo, en tu edificio, es ese vecino por lo demás agradable pero que en el fondo es un hijo de satanás que se complace con toda esta deriva. Porque en el fondo aunque no lo haga ver, te odia a ti más, a lo que tú representas, que aprecia su propia supervivencia. Y es esa compañera de trabajo tan mona ella, y tan aparentemente modosita, pero cómplice NECESARIA para que todo esto prospere. Quien apoya al PSOE o la izquierda, incluso quien vota PP, no es alguien normal o simplemente equivocado, cada día está más claro que son simplemente una manta de me gusta la fruta.
Así que lo dicho, esto está cada día más claro. Y tiene una solución cada vez más mala. No ya en España, sino en todo Occidente.
"El beso, el beso, el beso...." "Que disparate y que locura...." etc... etc....
Señores que esto no va de un beso. Es una campaña masiva de PROPAGANDA, apoyada por casi todos los medios, debidamente sobornados por el gobierno para imponer UNA DETERMINADA PERCEPCIÓN DE LA REALIDAD y una determinada ideología, pura ingeniería social. Apoyada desde la trastienda por el PP y toda clase de paniguados en su entorno, que ya se rindieron ante este nuevo orden con armas y bagajes hace años sin haber pegado un solo tiro. Es por eso que este tema no cae en el más absoluto de los ridículos o esperpento. Porque lo mantienen vigente y actual desde el poder con unos fines muy concretos.
Y es así, porque además la mal llamada justicia colabora activamente. Siendo que está camino de ser completamente infiltrada por la izquierda totalitaria, como ya hicieron con la educación, la justicia, la administración y tantas otras cosas. Señores lean a Gramsci.
No es más que otro de los síntomas evidentes de que vamos, si no lo somos ya, hacia un estado totalitario. NO AUTORITARIO, como pudo serlo el franquismo o el antiguo régimen. Sino algo que va mucho más allá.
Y esto es cada vez más evidente que no se va a arreglar por las buenas. Pese a que todavía existan ciertos conatos de resistencia civil, como VOX, parece cada vez más evidente que este partido no puede con lo que tiene en frente. El monstruo ya es demasiado poderoso y lo abarca todo.
Y el enemigo no es el Viruelo, o el juez, o la fruta feminista de turno. El enemigo lo tienes al lado, en tu trabajo, en tu edificio, es ese vecino por lo demás agradable pero que en el fondo es un hijo de satanás que se complace con toda esta deriva. Porque en el fondo aunque no lo haga ver, te odia a ti más, a lo que tú representas, que aprecia su propia supervivencia. Y es esa compañera de trabajo tan mona ella, y tan aparentemente modosita, pero cómplice NECESARIA para que todo esto prospere. Quien apoya al PSOE o la izquierda, incluso quien vota PP, no es alguien normal o simplemente equivocado, cada día está más claro que son simplemente una manta de me gusta la fruta.
Así que lo dicho, esto está cada día más claro. Y tiene una solución cada vez más mala. No ya en España, sino en todo Occidente.
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