Y ha puesto en peligro la vida de sus propios hijos metiendo a ese orate sin civilizar en casa, esa vieja es nauseabunda, solo por quedar bien entres sus amigos progres
Sí, eso es lo estropeado. Hay gente que tiene unos ideales tan arraigados, tan poco confrontados con la realidad, que hace burradas como la que señalas sin pensar.
No creo que haya que estigmatizar a los extranjeros que vienen de África o que sean fiel a la religión del amores por el hecho de serlo. Son personas, iguales que nosotros.
Ahora bien, han sido educados en el siglo XII, con todo lo que conlleva. Quiere decir que no han visto otra cosa en su vida que violencia, prevalencia de la religión por encima de la libertad, machismo del auténtico. Eso es lo que han conocido, y es una barrera francamente difícil de superar para poder integrarse. No digo yo que sea imposible (que no lo es), digo que hay que partir de ese hecho objetivo, especialmente cuando entran.
Si eres tan fulastre de no darte cuenta de esto, y de primeras metes uno así en tu casa con hijos adolescentes, eres una puñetera inconsciente que merece todo lo que le pueda pasar. Porque es como meter a un doberman en tu casa que haya sido maltratado teniendo dos gatos. Sí, un doberman bien educado puede ser un perro obediente y cariñoso, pero si ha sido educado en el palo continuo un día te arrepentirás sí o sí, al menos ten todas las precauciones del mundo.
Pero claro, estos oyen por la TV a los políticos que hablan de nuestros niños, de solidaridad y buenismos varios, sin darse cuenta (porque les falta inteligencia) que todos esos jamás tendrá un piso patera en su rellano, ni compartirá trabajo con quien venga. Porque ellos viven en barrios inalcanzables para los que vienen, con seguridad, sin coincidir jamás con ellos.
Y con un sentimiento buenista absolutamente ridículo y mal entendido, hacen cosas como estas para sentirse mejores personas, sin darse cuenta de que pueden estar moliendo no solo sus vidas, sino la de los que les rodean. Como se hubiera enamorada de una hija adolescente, a ver lo que hubiera pasado.
