la barquera
Madmaxista
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Mimamos a los delincuentes y maltratamos a los trabajadores; España se merece un holocausto nuclear.
''Mimamos a los delincuentes y maltratamos a los trabajadores''
Una idea de lo que pasa aquí que es casi una denominación de origen a los ojos de todo el mundo (hasta pilinguin se regodeaba con los alcaldes del sur, ante nuestras autoridades y los medios de comunicación, en un foro internacional);
. . . idea demoledora de cualquier ilusión entre la mayoría de españoles que dependemos de una de las pocas industrias que se mantienen en pie y nos estamos cargando a base de ignorancia, prepotencia y 'porqueyolovalguismo': el turismo.
''España se merece . . ."
España es una etiqueta, un nombre, una idea basada en un pasado demasiado pasado ya, como el 'romanticismo práctico' del que se vivió . . . y poco más.
El futuro pide y tiene datos e información casi al instante.
Los que no merecen consideración ni derecho de arrogarse el ''apellido'' de España, son los españoles; los individuos que medran a partir de las muchas debilidades y ''verguenzas'' que se le quieren achacar a ''España''. (esta excusa es muy socorrida en boca de los medradores, me recuerda a los que se quejan diciendo que ''la vida'' es muy triste o que ''a este mundo hemos venido a sufrir'' mientras zampan langostinos como barriles sin fondo, invocan consignas patéticas y miran para otro lado).
Que no es España, señores!
¡Que somos los españoles! siempre apuntando responsabilidades al vecino, al gato o a Dios (que da igual, el caso es seguir mamando y superviviendo a costa de lo que sea, hasta de los propios hijos, como en el medioevo y como lo viesen los artistas en Saturnos y esperpentos o relojes quebrados que reflejan la incomunicación y la desconexión, casi generalizada, con el tiempo presente).
La irresponsabilidad de estar en primera fila entre los deudores del mundo es de todos y cada uno de los españoles. - - - y, a partir de la imposición imparable de las nuevas formas de comunicación globales, ya no valdrán cantes, ni folclore ni espejitos -ni echarle la ''culpa'' a los etnianos- para seguir captando alegremente bienes que somos incapaces de producir por nosotros mismos - - -
Lo que tenemos muy ''mermadito'', aunque se haya 'homologado' en pocos años al resto del mundo occidental a base de títulos universitarios o pisitos monos, es el capital humano, que parece no querer acabar de modernizarse y acoplarse al ritmo de los tiempos.
divagando . . .
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