Alex Cosma
Madmaxista
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La nocividad MASIVA (en caso de existir) de los judíos y masones, al igual que cualesquiera otros (en caso de existir) no reside en sus creencias, sino en su PODER MASIVO, esto es, en su PODER CONCENTRADO. Es decir, el problema reside en eso que todos los antimasones y antijudíos están de acuerdo y en lo que coinciden con los judíos y con los masones: la existencia del PODER CONCENTRADO DEL ESTADO y la existencia del PODER CONCENTRADO DEL CAPITALISMO.
Los masones tienen el poder que tienen debido a su status, y no al revés. El alto mando militar, el alto funcionario, el alto dirigente político y el gran empresario que son masones (o judíos), tienen poder por ser alto mando militar, por ser altos funcionarios, por ser altos dirigentes políticos y por ser grandes empresarios, no por ser masones (o judíos).
Por lo demás, los 33 niveles de la masonería no son muy diferentes de los quizá 15 niveles que tiene el ESTADO en sus instituciones.
Todo en el ESTADO tiene ese diseño jerárquico-piramidal-estratificado, pero no debido a la masonería, sino debido a que el ESTADO surge de lo MILITAR (casta guerrera); el ESTADO es una creación militar con la que blindar a las clases dominantes ante el PUEBLO y con miras imperialistas-expansionistas en su lucha contra otros ESTADOS, u otras fuerzas.
Todo en el ESTADO tiene diseño militar: la educación, la sanidad, todo. No casualmente, y para el caso concreto de lo que se conoce como España, desde el falso golpe de Estado del 23F de 1981, el ejército ha pasado de ser la institución peor valorada (con razón) por el PUEBLO, a ser la institución del ESTADO mejor valorada. Debe ser que son los masones los que están interesados en mejorar la imagen del ejército, y debe ser que el propio ejército no tiene ni esa ni ninguna otra intención ni agenda propias, sino que el alto mando militar se limita a hacer crucigramas mientras espera que le lleguen órdenes desde la masonería, o desde la casta política (también controlada por la masonería), o desde el Gran Capital Privado (también masón).
Si todo es masón, entonces todos somos un producto de la masonería. Si no hay nada diferente de la masonería, no podemos señalarla como algo diferente a nosotros, por tanto, tampoco diferente o enfrentado a los conspiracionistas.
Sí, según la propia cosmovisión y planteamientos de los conspiracionistas, ellos mismos son masones o un producto de la masonería.
Los masones tienen el poder que tienen debido a su status, y no al revés. El alto mando militar, el alto funcionario, el alto dirigente político y el gran empresario que son masones (o judíos), tienen poder por ser alto mando militar, por ser altos funcionarios, por ser altos dirigentes políticos y por ser grandes empresarios, no por ser masones (o judíos).
Por lo demás, los 33 niveles de la masonería no son muy diferentes de los quizá 15 niveles que tiene el ESTADO en sus instituciones.
Todo en el ESTADO tiene ese diseño jerárquico-piramidal-estratificado, pero no debido a la masonería, sino debido a que el ESTADO surge de lo MILITAR (casta guerrera); el ESTADO es una creación militar con la que blindar a las clases dominantes ante el PUEBLO y con miras imperialistas-expansionistas en su lucha contra otros ESTADOS, u otras fuerzas.
Todo en el ESTADO tiene diseño militar: la educación, la sanidad, todo. No casualmente, y para el caso concreto de lo que se conoce como España, desde el falso golpe de Estado del 23F de 1981, el ejército ha pasado de ser la institución peor valorada (con razón) por el PUEBLO, a ser la institución del ESTADO mejor valorada. Debe ser que son los masones los que están interesados en mejorar la imagen del ejército, y debe ser que el propio ejército no tiene ni esa ni ninguna otra intención ni agenda propias, sino que el alto mando militar se limita a hacer crucigramas mientras espera que le lleguen órdenes desde la masonería, o desde la casta política (también controlada por la masonería), o desde el Gran Capital Privado (también masón).
Si todo es masón, entonces todos somos un producto de la masonería. Si no hay nada diferente de la masonería, no podemos señalarla como algo diferente a nosotros, por tanto, tampoco diferente o enfrentado a los conspiracionistas.
Sí, según la propia cosmovisión y planteamientos de los conspiracionistas, ellos mismos son masones o un producto de la masonería.