Pues así me lo he propuesto y así será.
Hasta ahora solo he tenido amistades homoeróticas (muchas), fantasías (muchas), algún escarceo fracasado de lo más turbio (uno), nada firme, nada satisfactorio. No he podido deleitarme con el cuerpo de un chico al que ame, tomarme mi tiempo, explorarlo, hacerme uno con él. Y quiero eso jorobar. Al menos intentarlo.
Con las chicas me ha ido mal, no he logrado mantener relaciones por más de un año y medio. He tenido muchísimas. No necesito prono, simplemente me basta con hacer memoria.
Pero estoy cansado de shishis. Las mujeres me resultan indiferentes casi. Obviamente las chicas jóvenes no, pero con 40 años son jodidamente inaccesibles para mi, simplemente porque estoy medio alopécico. Por eso. Con 35 tenia no una sino dos novietas de veintipocos al mismo tiempo. De las chicas más cañón con las he estado. Ninguna española. Pero con 40 la cosa cambia. Si me muevo y comienzan a ver como soy, la atracción se pone en marcha, pero no quiero formar una familia con una mujer y eso ellas lo sienten. Yo no estoy tan bueno como para ser la comida de una shoortena y no soy ningún cara padre. Realmente tengo miedo a la legislación española.
A los gays en cambio les gusto. No se porqué. Les gusto yo. Mi rollo. Mi persona. Mi talante. No lo sé. No tienen tantos remilgos con mis defectos. Les parezco interesante, no sé. La cosa fluye.
Las mujeres ya cercanas a los 40 no me ponen. Con los gays, por físico, es raro lo que siento. Hay fuerzas contrarias en mi, pero hay energía y hay camino. Quiero que el fuego camine conmigo y quiero dormir abrazado a mi chico peluche, un twink que sea mi bizcochito, al que hacerle cosquillas, caricias y que pueda ser uno con él. Por encima de los sexos creo en el amor.