Hola, Buenas Tardes:
Esta mañana escribí un post sobre Taiwán y la Crisis que ha provocado la visita de Pelosi. Pues, la verdad que no ha podido ser más oportuno en el tiempo...
Hoy, China ha disparado varios misiles balísticos DF-15B en los mares de alrededor de Taiwán como parte de los ejercicios militares a gran escala anunciados en respuesta a la visita de la Presidenta de la Cámara de Representantes de los EE.Uuu., Nancy Pelosi. Una visita que no ha podido ser más inoportuna e innecesaria.
Mucho Ojo! porque las zonas elegidas para estos ejercicios no tienen precedentes en su proximidad a Taiwán, acercándose mucho más que en la anterior Crisis del Estrecho de Taiwán en 1995-1996 y aumentando drásticamente las tensiones en la región. El Ministerio de Defensa de Taiwán denunció los ejercicios como equivalentes a un bloqueo militar de la isla
Unir a Taiwán con el continente ha sido el objetivo del Partido Comunista Chino desde que ganó la guerra civil de 1946-49 en el continente contra el líder nacionalista Chiang Kai-shek, quién huyó a través del estrecho con sus partidarios para instalar el Gobierno de la República de China sobre Taiwán.
En el 2021, el Presidente chino, Xi Jinping, reiteró que: "Resolver la cuestión de Taiwán y lograr la reunificación completa de China es una misión histórica y un compromiso inquebrantable del Partido Comunista de China".
Desde la perspectiva de Beijing, el apoyo de los Estados Unidos a Taiwán sigue siendo un obstáculo importante, si no el principal, para lograr la reunificación. Tras el estallido de la Guerra de Corea, los Estados Unidos puso fin a cualquier plan de oleada turística de China al desplegar la séptima flota en el Estrecho de Taiwán. Más tarde, en el 1954, firmó un tratado de defensa con Taiwán.
Los Estados Unidos, finalmente, rescindió ese tratado después de establecer relaciones diplomáticas con Beijing en 1979. Pero el Congreso de los EE.UU. respondió aprobando la Ley de Relaciones con Taiwán, que ordenaba a los Estados Unidos proporcionar armas defensivas a Taiwán y "mantener la capacidad de los Estados Unidos" para defender básicamente a Taiwán.
Aunque los EE.UU. también retiró el reconocimiento diplomático de Taiwán, Beijing se ha mantenido muy sensible a cualquier acción que sugiera que Washington está tratando de inyectar alguna "oficialidad" en la relación, ya que cree que esto constituiría una erosión en los compromisos de los Estados Unidos con China sobre el futuro de Taiwán.
Para Bejing, no se trata solo de la visita de Pelosi... aunque ha sido la primera en décadas de un político estadounidense de tan alto rango
Primero, Beijing percibe una tendencia alarmante en las relaciones de Washington con Taiwán. Ha habido un ritmo importante de aprobaciones de venta de armas, una serie de declaraciones del Presidente estadounidense, Joe Biden, sobre la defensa de Taiwán, algo que antes quedaba ambiguo... y una variedad de funcionarios y políticos estadounidenses que visitaron la isla, entre otras cosas.
El Gobierno de los Estados Unidos, ha declarado repetidamente que su postura básica no ha cambiado, pero para Beijing, todo esto sugiere que, en palabras del Ministro de Relaciones Exteriores de China, Wang Yi, Washington está buscando subrepticiamente "vaciar" su política. La visita de Pelosi ahora parece ser el punto en que Beijing ve la necesidad de enviar una señal poderosa para revertir esta tendencia.
En segundo lugar, Beijing ha puesto en juego su reputación al advertir explícitamente contra el viaje. Desde la cancillería, un dirigente ya amenazó con que el Ejército de Liberación "no se quedará con los brazos cruzados". Y Xi advirtió a Biden que "aquellos que juegan con fuego eventualmente se quemarán". La reputación y el prestigio de Beijing se han visto amenazados, y esto aumenta aún más lo que está en juego.
Por último, pero no menos importante, en unos meses China inaugurará su 20° Congreso del Partido. Los congresos de allí son un evento político importante que ocurre solo cada cinco años y que marcan el comienzo de cambios importantes en puestos políticos y personal clave. Este próximo congreso del partido será particularmente significativo, ya que según muchos informes, es probable que Xi rompa con el precedente y busque un tercer mandato como líder del Partido Comunista de China.
Incluso si la posición de Xi está asegurada, esto todavía implicará muchas maniobras políticas y posibles luchas internas. Por lo tanto, Xi no querrá exponerse a otros temas, especialmente a uno tan sensible y central como Taiwán. El curso de acción seguro a nivel nacional es adoptar una línea dura con Taiwán.
En mi opinión, se abren dos posibles escenarios...
El escenario optimista es que una vez que Beijing sienta que ha transmitido suficientemente su mensaje y haya pasado el 20° Congreso del Partido, las cosas se calmaran. Pero es factible que veamos un nuevo status quo de incursiones militares o paramilitares chinas regularizadas a través de la línea media del Estrecho de Taiwán.
Y el escenario pesimista es que Beijing tomará medidas que Washington considera demasiado incendiarias para dejarlas sin oposición, lo que provocaría una escalada mutua. La última vez (1995-1996), los Estados Unidos enviaron dos portaaviones. Si esta vez cada lado se ve obligado a reaccionar ante las provocaciones percibidas del otro, las cosas pueden entrar en una espiral muy peligrosa...
En fin, como decía está mañana, parecen existir unas enormes ganas de liarla bien fuerte en el planeta y eso que las cosas no están, precisamente, para tirar "cohetes".
Saludos.