Carson Burke
Forero Paco Demier
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- 8 Mar 2020
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Pertenezco a un clan de me gusta la fruta más locos que una cabra, que se creen que viven en el siglo XIX todavía. Somos 17 familias que se han ido ramificando y comiéndose el tejido empresarial de la ciudad donde vivimos. Mi propio padre tiene una charcutería y una granja, que se espera que yo herede. Otros tíos tienen lavanderías, restaurantes, salones de eventos, concesionarios de coches, de todo. Cada uno se gana la vida con un negocio, y apoya económicamente al resto con préstamos cuando lo necesitan. Las relaciones se afianzan casando a los hijos.
A veces, cuando en una línea no hay suficientes para emparejar a todos, se acude a amigos, auténticas "familias satélite" formadas por empleados o por viejos amigos y redes de contactos. Pero si se puede, te casas con un primo o prima. Yo desde que nací, estoy destinado a casarme con mi prima Natalia, cosa que sucederá en junio. Yo tengo 22 años, ella 21.
Es una locura. No puedes pensar en nada que no sea el trabajo y criar, como los conejos. Los hombres vamos vestidos de misa y comunión, llevamos los negocios. De jóvenes somos aprendices en el negocio de nuestro padre o de algún tío nuestro, después de sacar una carrera y hacer un máster, que es una obligación y una presión brutal. Yo estoy acabando ADE. Las mujeres al terminar Bachillerato, en casa, a esperar a casarse y a hacer de conejas.
No tienes disposición de nada. Viviremos con mis padres. Mi padre manejará el negocio y mi progenitora, la casa y la educación de los nietos. No puedes decidir nada. Todo el dinero se guarda para cuando lo necesitemos, nosotros u otros. No puedes disponer de nada.
Mi prima es muy maja, pero tampoco tengo ganas de casarme con ella. No sé que shishi hacer.
A veces, cuando en una línea no hay suficientes para emparejar a todos, se acude a amigos, auténticas "familias satélite" formadas por empleados o por viejos amigos y redes de contactos. Pero si se puede, te casas con un primo o prima. Yo desde que nací, estoy destinado a casarme con mi prima Natalia, cosa que sucederá en junio. Yo tengo 22 años, ella 21.
Es una locura. No puedes pensar en nada que no sea el trabajo y criar, como los conejos. Los hombres vamos vestidos de misa y comunión, llevamos los negocios. De jóvenes somos aprendices en el negocio de nuestro padre o de algún tío nuestro, después de sacar una carrera y hacer un máster, que es una obligación y una presión brutal. Yo estoy acabando ADE. Las mujeres al terminar Bachillerato, en casa, a esperar a casarse y a hacer de conejas.
No tienes disposición de nada. Viviremos con mis padres. Mi padre manejará el negocio y mi progenitora, la casa y la educación de los nietos. No puedes decidir nada. Todo el dinero se guarda para cuando lo necesitemos, nosotros u otros. No puedes disponer de nada.
Mi prima es muy maja, pero tampoco tengo ganas de casarme con ella. No sé que shishi hacer.
