ULTRAPACO
Caudillo
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Con un nuevo gobierno ya formado, la DGT comienza el nuevo ciclo con una serie de medidas encaminadas a reducir la disparada edad media del parque móvil español. El organismo gubernamental – según declaraciones de Fernando Inocencio, uno de sus técnicos – afirma que el objetivo último es mejorar nuestra seguridad, y por ello, ha presentado una medida que será muy polémica: exigir a los coches anteriores a 1995 un permiso especial para circular. Un permiso que restringirá aun más su circulación, complementario al sistema de etiquetado ambiental.
¿En qué consiste este permiso especial para coches de al menos 28 años de edad? Según explica el departamento de Servicios de Innovación (S.I.) de la DGT, es un distintivo visual, una pegatina que tendremos que colocar en donde colocaríamos la habitual “pegatina” ambiental. Todos los coches anteriores a 1995 carecen de etiqueta ambiental, por tanto, no ocuparemos más espacio en el parabrisas. Este distintivo, este permiso especial de circulación, permitirá que el coche pueda circular solamente los fines de semana y festivos.
La medida afecta a todos los vehículos de más de 28 años, hayan sido matriculados como históricos o no
La DGT quiere, de esta forma, eliminar de la circulación diaria, y de un plumazo, los coches más antiguos. La medida ha sido criticada con dureza por parte de las asociaciones de automovilistas, especialmente las que agrupan a propietarios de coches clásicos. La Asociación de los Clásicos Inocentes lamenta esta nueva traba a vehículos que se encuentran en el mismo – o mejor – orden de circulación que cualquier otro vehículo, y que tanto superan inspecciones de ITV rutinarias como pagan religiosamente sus Impuestos de Circulación.
La obtención de este permiso especial de circulación solo será posible en las estaciones de ITV, existiendo un periodo de jovenlandesa hasta el vencimiento de la actual ITV del vehículo. Aunque no es obligatoria a nivel nacional llevar visibles los distintivos ambientales de la DGT, llevar en el parabrisas el permiso especial de circulación será obligatorio. De lo contrario, el conductor se expondrá a una sanción de 200 euros sin pérdida de puntos. Lo mismo ocurrirá si el vehículo es “cazado” circulando de lunes a viernes no festivos en las calles o carreteras.
La medida ha sido especialmente criticada en el mundo rural y adolece de una nula justicia social
Las quejas que ha habido acerca de la calidad de los distintivos ambientales de la DGT ha provocado que el organismo desarrolle una etiqueta de alta calidad, con un código holográfico inspirado en los presentes en los DNI y los billetes de euro. Además, es resistente a los rayos ultravioleta y no perderá tonalidad por el sol. Su tonalidad es rojo y la etiqueta muestra, en gran tamaño, la letra P, en referencia al carácter “pretérito” de los vehículos que la reciban. El coste de la etiqueta asciende a 28 euros para el propietario del coche.
La “pegatina H” se une a la “etiqueta D” de la DGT en una serie de medidas tan polémicas como inexistentes. Una broma de mal gusto, incluso.
¿En qué consiste este permiso especial para coches de al menos 28 años de edad? Según explica el departamento de Servicios de Innovación (S.I.) de la DGT, es un distintivo visual, una pegatina que tendremos que colocar en donde colocaríamos la habitual “pegatina” ambiental. Todos los coches anteriores a 1995 carecen de etiqueta ambiental, por tanto, no ocuparemos más espacio en el parabrisas. Este distintivo, este permiso especial de circulación, permitirá que el coche pueda circular solamente los fines de semana y festivos.
La medida afecta a todos los vehículos de más de 28 años, hayan sido matriculados como históricos o no
La DGT quiere, de esta forma, eliminar de la circulación diaria, y de un plumazo, los coches más antiguos. La medida ha sido criticada con dureza por parte de las asociaciones de automovilistas, especialmente las que agrupan a propietarios de coches clásicos. La Asociación de los Clásicos Inocentes lamenta esta nueva traba a vehículos que se encuentran en el mismo – o mejor – orden de circulación que cualquier otro vehículo, y que tanto superan inspecciones de ITV rutinarias como pagan religiosamente sus Impuestos de Circulación.
La obtención de este permiso especial de circulación solo será posible en las estaciones de ITV, existiendo un periodo de jovenlandesa hasta el vencimiento de la actual ITV del vehículo. Aunque no es obligatoria a nivel nacional llevar visibles los distintivos ambientales de la DGT, llevar en el parabrisas el permiso especial de circulación será obligatorio. De lo contrario, el conductor se expondrá a una sanción de 200 euros sin pérdida de puntos. Lo mismo ocurrirá si el vehículo es “cazado” circulando de lunes a viernes no festivos en las calles o carreteras.
La medida ha sido especialmente criticada en el mundo rural y adolece de una nula justicia social
Las quejas que ha habido acerca de la calidad de los distintivos ambientales de la DGT ha provocado que el organismo desarrolle una etiqueta de alta calidad, con un código holográfico inspirado en los presentes en los DNI y los billetes de euro. Además, es resistente a los rayos ultravioleta y no perderá tonalidad por el sol. Su tonalidad es rojo y la etiqueta muestra, en gran tamaño, la letra P, en referencia al carácter “pretérito” de los vehículos que la reciban. El coste de la etiqueta asciende a 28 euros para el propietario del coche.
La “pegatina H” se une a la “etiqueta D” de la DGT en una serie de medidas tan polémicas como inexistentes. Una broma de mal gusto, incluso.
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