Hablamos de delincuentes de esos que te atacan a punta de navaja en tu barrio, que violan a tu hija en un callejón... Esos que son legión, de los que se manchan las manos y te hacen el día a día un infierno.
No hablamos de los que más roban o los más me gusta la fruta, esos ya sabemos todos donde están y a muchos se les vota cada 4 años o menos.
Cuando tienes algo que perder, cuando tienes propiedades, familia, trabajo, una imagen... Las posibilidades de que te de por ser un delincuente callejero se reducen mucho, cuanto menos tienes en cambio más fácil es dar el salto, cuando no tienes nada que perder no dar el salto a ser un animal y comerte al débil es muy duro.