¿Libros antiguos que sigan valiendo la pena?

Lo mejor que he leído en mi vida tras el Quijote y junto a Crimen y Castigo de Dostoievski.

Lo recomiendo. Eso sí, poco a poco, son 46 libros.

Me alegro, gracias por el aporte. ¿Por qué crees que es tan bueno? ¿Descripciones psicológicas?
 
Soy asiduo de rastros, cualquier libro antiguo es una joya, por lo menos para mí. Los venden a kilos, enciclopedias y cajas llenas tengo. Maldito espacio.
Uno de los últimos que me gustó por la edición y el estado, un Rimas y Leyendas de Becquer del 36. Por 50 centimos era un sacrilegio dejarlo en el montón.
 
Me alegro, gracias por el aporte. ¿Por qué crees que es tan bueno? ¿Descripciones psicológicas?
Es la historia de España del siglo XIX, escrita por el consierado el segundo mejor escritor en lengua española de la historia tras Cervantes.

Lo tiene todo: la forma de narrar, la acción, los personajes, sus miedos y pasiones... y una riqueza de vocabulario que hoy en día ya ha desaparecido.

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Es la historia de España del siglo XIX, escrita por el consierado el segundo mejor escritor en lengua española de la historia tras Cervantes.

Lo tiene todo: la forma de narrar, la acción, los personajes, sus miedos y pasiones... y una riqueza de vocabulario que hoy en día ya ha desaparecido.

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Me estás dando ganas de buscarlo :D

Thanks
 
Soy asiduo de rastros, cualquier libro antiguo es una joya, por lo menos para mí. Los venden a kilos, enciclopedias y cajas llenas tengo. Maldito espacio.
Uno de los últimos que me gustó por la edición y el estado, un Rimas y Leyendas de Becquer del 36. Por 50 centimos era un sacrilegio dejarlo en el montón.

¿De medicina/cocina/estilo de vida tienes alguno que te guste?
 
¿De medicina/cocina/estilo de vida tienes alguno que te guste?
De narrativa no muchos. De ensayo, ciencia, tecnología, vamos tiene que entrame por los ojos. Hay bastantes del siglo XIX, es que me dá pena verlos tirados por el suelo. Además los conocidos hasta me los guardan cuando hacen limpieza en casa.
 
Los que se me vienen a la cabeza. Son muy conocidos, no hace falta dar mucho detalle.

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Esos os conozco todos, aunque la biblia no la he leído entera. Thanks.

De narrativa no muchos. De ensayo, ciencia, tecnología, vamos tiene que entrame por los ojos. Hay bastantes del siglo XIX, es que me dá pena verlos tirados por el suelo. Además los conocidos hasta me los guardan cuando hacen limpieza en casa.

De ciencia y tecnoogía del siglo XIX tienen que ser muy interesantes, ¿Alguna fotillo? Interesa!
 
Esto también me ha gustado mucho, se puede pinchar en "ver ejemplar" y ver el contenido:

Revista de ciencias históricas, genealogía, arqueología, heráldica y bellas artes, etc., es el subtítulo de esta publicación de frecuencia mensual que aparece en junio de 1906, bajo la dirección de Julio Lecea y Navas. Su director artístico es el dibujante Julio de Yepes y Rosales; su secretario de redacción, Samuel Cardona, y el administrador y gerente, Venancio Monasterio, que será sustituido por Ricardo Gil de Balenchana.

Cada entrega comienza con la sección Notas del mes, en el que Lecea da cuenta de novedades sobre las cuestiones principales de la revista, que insertará estudios y descripciones de los principales apellidos y familias y casas españolas y de otros países, de títulos nobiliarios y órdenes militares y de sus miembros, de poblaciones, archivos, maestranzas, certificaciones, relaciones de cartas de hidalguía, blasones, sellos, etc. Asimismo, tiene una sección de Bibliografía nobiliaria y otra breve de Noticias.

Sus páginas están ilustradas con dibujos de blasones, insignias, escudos, sellos, etc., además de fotograbados de reproducciones artísticas, vistas de edificios singulares (catedrales, archivos) y también de retratos de personajes de la nobleza del momento, que forman una colección.

También publica estudios teóricos, como unas Notas heráldicas, de Luis Albornoz, y el titulado Rioja antigua, de Narciso Hergueta y Martín, así como unos Datos para la historia nobiliaria. Entre sus colaboradores están Eduardo de Nacha, José Alvani, Gregorio García Ciprés, Santiago Otero Enríquez, Ubaldo de Molina, Manuel Cortina y de la Vega, Antonio Pérez Arcas y el Conde de Cinarca.

A partir de enero de 1909, al título se le añadirá la indicación “publicazione ufficiale dell’Instituto Araldico Italiano”, presidido por Tomaso Pugliati. Y desde abril, se agrega “et revues heraldique et des questions heraldiques, réunies, Bulletin de l’Academie Heraldique de France”, siendo Vicomte de Mazléres-Mauleon, el director de esta sección francesa.

La revista publicará textos en francés, italiano y portugués, de Guillaume Swarth, Jules Colin, C. de Saint-Marc, Cesare Fogli, Antonio Baiao, Eugéne Harot y Baron de Roure de Paulin, entre otros.

Cada año conforma un tomo, con índices de los principales apellidos y títulos nobiliarios que se mencionan en sus cuadernos. El último número de la colección corresponde a diciembre de 1910. Se desconoce si siguió publicándose, pero, en 1913, Julio de Yepes y Rosales y Mariano Gil de Balenchana inician la publicación de Nueva academia heráldica y archivos históricos de genealogía y heráldica, que todavía seguía publicándose en 1923.



Y esta otra:

Con el subtítulo “periódico resumen de adelantos científicos y conocimientos útiles aplicables a las artes, a la industria y a la agricultura”, comienza a publicarse el 20 de mayo de 1899 esta revista con unas bellas cubiertas estampadas a tonalidad y otras ilustraciones en el interior de sus dieciocho páginas, en blanco y neցro, como dibujos y figuras y fotograbados sobre una gran diversidad de materias referidas a geografía (inserta numerosos mapas tanto de España como del mundo y de vistas de ciudades), geología, botánica, agricultura, enología, zoología, meteorología, astronomía, química (general, analítica e industrial), perfumería, fotografía, minería, construcciones y tras*portes navales o ferroviarios, electricidad, mecánica, montes, microbiología, higiene, acústica, toxicología, obras públicas, expediciones viajeras, antropología, exposiciones universales o congresos, o procedimientos físico-químicos generalmente aplicados a la tecnología, la industria y el comercio. Son textos de divulgación o noticias centradas en las “novedades de la ciencia” y en los “secretos de la industria”, tal como se indica en su cabecera.

La revista se estructura en secciones, como las tituladas Los héroes de la ciencia, generalmente acompañada de un fotograbado con el retrato de cada biografiado, que firman Mariano Maciá, Eduard Fontseré, Arturo Bofill, J. de Riera, J. Batlle o J. Prats, entre otros; Apuntes politécnicos; Novedades científicas, como revista de revistas extranjeras; Crónica; Industria y comercio; Variedades; Notas curiosas o Bibliografía. También inserta anuncios publicitarios y un Memorándum industrial, y una sección recreativa, con pasatiempos o alguna máxima gráfica. Realizó una edición especial para las Américas, teniendo corresponsales en México y Buenos Aires.

Compuesta a una y dos columnas, su paginación es continuada y en la última entrega de cada año confecciona un índice de las materias contenidas en cada volumen o tomo. También al final de cada entrega inserta el sumario del número anterior. Como explicación de sus informaciones inserta numerosos dibujos y figuras explicativas de aparatos, máquinas, experimentos o fórmulas, y al principio unos bellos mapas en tonalidad o dibujos así mismo coloreados de construcciones o inventos. Por ejemplo, publica el mapa con el trazado del ferrocarril tras*iberiano o una vista del comedor instalado en la barquilla-vagón del dirigible Alemania; y ofrece una amplia información sobre cuestiones químicas de fotografía, cámaras para usos científicos, como la microfotografía, la iluminación, el laboratorio o tipos de papel de reproducción.

Al principio fue una “revista quincenal”, saliendo los días 5 y 20 de cada mes, para, a partir de enero de 1901, adoptar el subtítulo “revista semanal ilustrada de ciencias y sus aplicaciones prácticas a la industria” y aparecer desde entonces cada sábado. Su fundador y primer director fue el médico M. de Sanz Anglada, que a partir del 16 de noviembre de ese año (número 85) será sustituido en la dirección por un especialista en meteorología como fue el físico Eduard Fontseré i Riba (1870-1970), principal redactor de sus contenidos y catedrático de la Universidad de Barcelona. A partir del 20 de junio de 1903, Mariano Maciá entrega también la propiedad y edición a J. Masgrau y Planas, siendo administrador Leopoldo Varó. A partir del cuatro de julio de este último año (número 170), la revista inicia una segunda época, asumiendo su dirección el biólogo Odón de Buen (1863-1945), que será sustituido por el químico y farmacéutico Casimir Brugués (1863-1940) a partir del dos de julio de 1904 (número 222). Cada editor y director le dará a la revista un carácter específico.

Tras publicar el número 588, el ocho de julio de 1911, modifica su título a: El Mundo científico, inventos modernos, que también forma parte de la colección de la Biblioteca Nacional de España.


Copio y pego la intro del primer volumen:

"Allá en la cumbre de un monte ciclópeo que se pierde en lo infinito, se levanta el tempo suntuoso de la Ciencia, digno holocausto a la matrona augusta, eternamente juvenil, eternamente hermosa, que desde la sublime altura, olivo de paz y palmas inmarcesibles de gloria ofrece a los sufridos héroes del saber.
En la cátedra, en el laboratorio, en el rincón silencioso del hogar, hombres hay que sin descanso luchan para escalar la cima, y los pocos que, tras de amargos sinsabores, cruzan por fin los dinteles del olímpico alcázar, cuantas flores en su larga peregrinación han recogido, las ceden generosos, a los espléndidos vergeles que para solaz de la inteligencia humana festonean la falda de la titánica mole.
Es nuestro propósito, recorrer aquellos pensiles inmensos, para admirar de sus flores las delicadas corolas; copiar de sus pétalos los vívidos colores, extractar de sus perfumes las más útiles esencias.
Mariposas del estudio, laboriosas abejas de la industria, seguidnos, si os place librar el néctar del inagotable de sus cálices; seguidnos, si os place deleitaros en la miel de tan bellas enseñanzas, y tal vez algún día, al sacar de las mismas práctico provecho para las ruines necesidades de la vida, bendigáis las populares páginas de
EL MUNDO CIENTÍFICO."
 
Lo primero a largar que para mí, una novela.no es un libro.
Ahora te digo que cualquier libro del A XIX hacia atrás es una joya, y por supuesto, las joyas romanas,griegas...ufff
 
Lo primero a largar que para mí, una novela.no es un libro.
Ahora te digo que cualquier libro del A XIX hacia atrás es una joya, y por supuesto, las joyas romanas,griegas...ufff

Pon alguno concreto, que tal vez no sea muy conocido pero que te haya impactado positivamente. Si tienes tiempo claro!
 
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