Estoy convencido que estos controles de precios impuestos por los socialistas de uno u otro país no es sino la forma deliberada y planificada, en connivencia con grandes capitales, de ir debilitando a las clases medias y favorecer que no haya propietarios. Es imposible ser tan jodidamente iluso de creer que limitar precios va a redundar en beneficio del consumidor cuando todos los ejemplos históricos de control de precios terminan en carestía cuando no en muertes y hambrunas.