Me refería a una cola larga, porque los testigos oculares afirman que tenía la cola como un gato o un perro.
Vayamos por partes, como dijo Jack el Destripador.
La bestiga de Gevaudan no fue un caso aislado en Francia. Hay registros de muchos animales similares hasta el siglo XX.
Bête de Cinglais — Wikipédia (wikipedia.org)
Bête de l'Auxerrois — Wikipédia (wikipedia.org)
Bête de Primarette — Wikipédia (wikipedia.org)
Bête du Lyonnais — Wikipédia (wikipedia.org)
Bête des Cévennes — Wikipédia (wikipedia.org)
Estos son solo algunos ejemplos. Lo que llamó la atención de la bestia de Gevaudan (y en Francia hay muchos libros escritos sobre el tema), es que se intuyó la intervención humana. Varios testigos acertaron a la bestia con sus armas, esta cayó abatida, se volvió a levantar, y luego no encontraron restos de sangre, por lo que parece muy probable que la misma iba acorazada.
En aquella época era normal el entrenar grandes perros para la guerra, molosos en su gran mayoría, cuyos lomos iban protegidos con pieles de jabalí, ya que son muy duras y no penetraban las balas de esa época. Lo cual parece ser el caso.
Sin embargo, Marie-Jeanne Vallet, consiguió clavarle una lanza en el pecho, por lo que se puede afirmar que por debajo no llevaba coraza. Lo cual coincide con lo que se hacía con los perros de guerra, que era ponerle la protección en el lomo, no por debajo.
Los testigos también afirman que era mucho más grande que un lobo, que suele pesar entre los 50 y lo 75 kg. Y este debía rondar los 200-300 kg. Debió pues ser un oso, un león o un tigre como poco. Aunque también hay quien afirma que su comportamiento era el propio de una hiena. Y es que esta bestia mató que se sepa, a entre 80 y 120 personas, pero hay quién afirma que fueron hasta 300. Pero no atacaba por hambre, sino, como si hubiera sido entrenada para ello, solo atacaba a humanos. Hubo un niño que estaba guardando ovejas, que se encontró con la bestia y se metió en medio del rebaño. La bestia no atacó a las ovejas, lo que sería normal si atacara por hambre, sino que solo atacaba a humanos. Como hacían con los perros de guerra, estaba entrenada para atacar humanos.
Sin embargo, los testigos afirman que podía ponerse en pie sobre sus patas traseras y trepar por los muros, y que tenía las orejas redondas, que usaba su cola para atacar y que sus garras parecían pezuñas. ¿Pudo llevar también unas garras artificiales metálicas así como una prótesis en la cola? Luego, otra cosa sorprendente, es que aparecieron cadáveres con las cabezas arrancadas. Y ni las hienas ni los lobos ni los perros tienen fuerza suficiente en la mandíbula para hacer tal cosa. Y otra cosa aún más sorprendente fue que algunos cadáveres aparecieron desnudos y con violencia sensual, por lo que siempre se ha intuido que había una intervención humana tras los hechos. Aunque también pudo ser un orate que después de violar y apiolar hizo pasar sus actos por los de la bestia para dirigir las culpas sobre la alimaña.
En Gevaudan, además de estar el mayor parque de lobos de Europa, hay un museo que cuenta los hechos. Estuve hace muchos años en ambos y os recomiendo la visita.
La bête du Gévaudan (loupsdugevaudan.com)