El problema es lidiar con los eslóganes.
Vivimos en el mundo de la comunicación de masas, todo el debate y el intercambio de ideas funciona como un mercado de pensamientos, con la imagen de libres y bienintencionados, pero en realidad si están ahí es porque alguien paga para que se les haga circular.
Ayer
@M. Priede dejaba un hilo sobre el reciclaje de plástico que refleja esto, cómo la industria pagó para esparcir esa idea, para vender más plástico, cuando en realidad casi no se recicla.
Pongo otro ejemplo en el tema energético, la nucelar.
Cuántos liberales hartos de plaquitas y molinillos no entran al trapo de demandar el uso de esa energía, y tal vez al final queriendo defender el libre mercado acaban en la trinchera de las subvenciones a fondo perdido.
Hay que hilar muy fino, ideas por y para el pueblo hay pocas, curiosamente al final entre bromas y tal, he acabado por tomar más en serio algunas insensateces del foro, como las golden cadenacas y las duchas frías y no ser Votante de Vox ni covidiota, que al final es lo mejor que tenemos a mano como individuos para dar guerra.