exterriga
Madmaxista
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Como siempre el problema es el dinero. Para ser profesional del ajedrez es necesario ganar torneos con regularidad, sin los ingresos que dan los premios es imposible dedicarse al ajedrez.
Mónica Calzetta se queja de que ni siquiera ella, con un palmarés tan impresionante, ha podido vivir bien del ajedrez. «He podido ganarme la vida dando clases, pero compitiendo desde luego que no. Me molesta en el sentido de que los premios de los campeonatos femeninos tampoco motivan mucho. En ese sentido, creo que la FIDE lo está haciendo muy bien y promocionan mucho el ajedrez femenino, que ya tocaba. Falta que lo haga la FEDA también», finaliza.
En España hay muy pocos jugadores que viven gracias a los premios, fijos por invitación o ficha por algún equipo:
Antón Guijarro, Shirov, Vallejo y alguno más.
Luego hay un número considerable, decenas, que viven entre lo anterior y ser youtuber (o periodista):
Cuenca, David Martínez, Fernández Siles y tantos otros.
Pero la mayoría de los que viven (o malviven) del ajedrez en España, es por dar clases. Cualquiera que llega a ser maestro, con 2300 de ELO o más y no se gana la vida de premios o streamer podría hacerlo. De hecho, en España son cientos, quizá miles. En clubes, ayuntamientos, internet, colegios,....
Pero es muy curioso, hay muy pocas mujeres que también se dedican a ello. Claro que existen, Calzetta, Botez, ... dan fe de ello. Pero a mi juicio se mantiene la misma proporción (hombres - mujeres) que en las competiciones. Curioso.