"¿De dónde viene la idea de la jerarquía como pura construcción social?"
Hasta las langostas he llegado...
Veo que has esquivado el argumento.
La base del argumento no es discutir sobre si es justo o injusto, sino demostrar que no es una construcción scial. No hay una opresión consciente y deliberada sino que son manifestaciones de los rasgos diferenciados de nuestra biología.
Además, partiendo de eso, se ven múltiples fallos lógicos del discurso.
Mezcla entre diferenciación individual y de identificación de grupo.
Que los hombres sean más fuertes que las mujeres es un rasgo de grupo, que se ve a través de un análisis estadístico. Es solo una forma compacta de decir, "los hombres, de media, son más fuertes que las mujeres".
Eso no significa que todos los hombres sean más fuertes que todas las mujeres ni niega la existencia de mujeres más fuertes que la mayor parte de los hombres.
De esa forma, cuando en los análisis se ve que "las mujeres cobran menos que los hombres" (hecho cierto, demostrable con datos) se hace una proyección errónea. "Cobran menos porque se las discrimina por su sesso".
Puede haber múltiples motivos para que se derive tal diferenciación, y sin analizar dichos motivos no se puede entender la realidad.
Esto es... cobran menos, porque como mujeres, son diferentes (de media), y tales rasgos son menos premiados en el mundo laboral.
A veces estos hechos son rechazados por el feminismo. Otras veces el debate es reconducido, aceptando esto, pero relanzando el victimismo desde otra perspectiva.
"¡Entonces es el mercado el que es injusto y "patriarcal"!"
Decir que el mercado es "injusto" no es ni verdadero, ni falso. Es una cuestión de perspectiva sobre lo que es "justo", pues depende del criterio de evaluación.
Lo que es manifiestamente falso es que es "patriarcal", si entendemos esto como que es una construcción intencional para premiar al hombre y discriminar a la mujer.
En realidad, el criterio del mercado está realizado sobre los deseos de los participantes de obtener el máximo beneficio de sus intercambios. Tan simple como eso. Nace de la natural forma de comercio entre desconocidos.
¿Es eso "justo"?
Pues depende de la perspectiva. Hay múltiples perspectivas. Por ejemplo el de la meritocracia de resultados, que es la que convencionalmente se asocia con la forma liberal del mercado. Desde esa perspectiva, que los hombres obtengan más sueldo que las mujeres es totalmente justo.
Existen otras perspectivas como la de la meritocracia de esfuerzo. Desde esa perspectiva, diferente a la óptica de mercado actual, es posible, aunque no seguro, que estuvieramos en una situación de discriminación.
Sin embargo hay que visualizar lo peligroso que es premiar el esfuerzo respecto al resultado.
Imagínese un jugador de fútbol. Usted es un apasionado y dedica todo su esfuerzo humanamente posible a ser el mejor jugador posible.
Compitiendo contra sí mismo, llega a ser lo mejor de lo mejor. Pero biológicamente ha nacido como un hombre del montón. No tiene una resistencia física particular, ni reflejos por encima de la media, etc. etc.
Su esfuerzo le premia con una considerable mejora de rendimiento, pero sigue estando muy lejos de los jugadores de élite. Sin embargo, comparando su dedicación, usted está entre las personas más dedicadas del mundo a este deporte.
¿Debe usted jugar y cobrar en base a su esfuerzo? ¿Un jugador "mediocre" (perspectiva de resultados)?
La meritocracia de esfuerzo es útil cuando lograr inspirar y motivar es lo más importante de la actividad. Puede ser un buen criterio cuando se está aprendiendo, o cuando el resultado de la labor es secundaria porque en realidad hay exceso productivo. Tener a la gente motivada puede ser una meta en sí misma.
Pero hay muchas circunstancias donde el mayor beneficio está en el resultado de la actividad y no en el desarrollo mismo de la actividad. Y ahí, la meritocracia de resultados tiene toda su razón de ser.
Pero desde luego, si hay un mal criterio, es la aplicación de medidas discriminatorias (por más que se llamen "positivas") basadas en asunciones incorrectas. Si habláramos de la promoción de la meritocracia de esfuerzo en ciertos ambientes es discutible. La "discriminación positiva" surge de una idea totalmente errónea, de asumir que las diferencias nacen en una discriminación explícita en la asociación estadística detectada y que se pretende compensar con una discriminación opuesta.
Si el origen de la discriminación es diferente al criterio compensando, el resultado es que tenemos a gente discriminada por unos factores no compensados y gente discriminada por factores inventados para luchar contra discriminaciones inexistentes.
El resultado no puede ser peor.
