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Madmaxista
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- 19 Oct 2010
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Aviso: esta entrada no va de la reforma ministerial, si no de la visión de un ciudadano medio sobre la situación económica en base a una reciente reforma en un piso particular y otras vivencias recientes.
para no perderse, esta chapa se divide en:
- mi historieta (intro rollo y chapa, lo siento, pueden saltársela, a no ser que tengan por deporte el tiro al pepito, les dará juego)
- el mercado inmobiliario se mueve, al menos en mi barrio
- el precio de las cosas
- ¿qué pasa con el empleo?
- de la gestión empresarial como fuente de crisis
- la crisis en burbuja.info
- una conclusión final
mi historieta
Hace tiempo que la gente de mi entorno me decía que debía dejar el pesimismo y mirar a mi alrededor, que la situación no está tan mal como en esos foros y blogs que lees en internet. Yo vivía felizmente de alquiler. Mi primera opción había sido la compra de vivienda, pero a pesar de tener una formación, empleo e ingresos bastante más que decentes me parecía impensable hipotecarme en las circunstancias en las que lo hacían mis amigos y conocidos, implicando a lafamilia y el resto de su vida en una deuda inmensa... si no podía pagar un piso en propiedad había que buscar alternativas racionales: alquiler al canto.
De vez en cuanto miraba las páginas de anuncios de pisos, me acercaba a alguna inmobiliaria... llamaba a algún anuncio colgado en la ventana de algún piso que me parecía interesante... la locura burbujista primero, el nuncabajismo después y el poco bajismo que siguió me hicieron perder el interés en la vivienda en propiedad y me hice fuerte en mi pisito de alquiler: un tercio de mis ingresos netos, tres dormitorios, relativamente bien ubicado...
Hasta este mes de julio, en que, por casualidad me tropecé con un piso que me gustaba, similar al piso en el que estaba de alquiler, pero en mejor finca, rodeado de jardines... A la venta, después de apretar al anunciante (particular a particular, sin intermediarios), en un precio cuatro veces mis ingresos brutos anuales... pregunté por hipoteca, reservando una partida de mis ahorros para la reforma, no suponía más del 70% del precio de compra - venta, cuotas por un tercio de mis ingresos netos a diez años... me decidí a comprar. Y a reformar, aquí es donde viene lo bueno.
La gente que se alegró de que tomase la decisión de comprar aseguraba que la reforma me saldría muy barata y la haría muy deprisa por la situación económica. Nada de eso. Sí es cierto que los materiales me los sirvieron en un plazo bastante rápido y que he encontrado ofertas bastante razonables para algunas cosas, pero la tónica general en la crisis es que el personal prefiere que no se acuerden de ellos a la hora de trabajar.
Antes de iniciar la reforma pedí varias ofertas. Terminada la reforma, algunos presupuestos todavía no me han llegado. De los que recibí dos eran "nacionales" y tres de la europa del este. En precio andan todos más o menos igual, la pega es cómo se plantean:
- El que más confianza me daba y mejor había entendido cómo quería realizar la reforma (nacional) no trabajaba en agosto.
- El otro nacional quería hacer la reforma a su gusto y cantaba por todas partes que de donde sacaba la mayor parte de su beneficio era inflando el precio de las materias primas, hasta el extremo de que no me hacía la preinstalación del aire acondicionado si no me ponía las máquinas.
- Uno de los procedentes de países recién incorporados a la UE me presupuestaba únicamente mano de obra. Este presupuesto me servía para tener un criterio en este sentido, pero al carecer de la infraestructura logística y el tiempo necesario para encargarme de comprar y tras*portar todos los materiales no me valía. A pesar de ser el más competitivo de todos los presupuestos.
- Ente los otros dos la decisión fue un poco al azar, eran serios, tenían medios y experiencia, precios intermedios y ganas de trabajar.
En resumen, el emprendedor patrio sigue pensando que puede estafar al cliente inflando precios por cosas que el propio cliente puede comprar por su cuenta o bien puede planificarse su vida sabiendo qué carga de trabajo quiere soportar para permitirse unas vacaciones de vez en cuando.
Una observación: el precio de los suministros de fontanería a subido desde julio hasta ahora, al menos un combinado de ducha que he tenido que cambiar se oferta ahora por un tercio más de su precio hace unos meses y lo mismo con un embellecedor que no compré en su día a 6 euros y por el que ahora me roban 14.
el mercado inmobiliario se mueve, al menos en mi barrio
Lejos del baile de las cifras y los mensajes catastrofistas, en cualquier calle de mi barrio se puede encontrar con facilidad un contenedor de obra repleto de cascotes. Cualquier manzana tiene su correspondiente piso en plena reforma. Y a pesar de la disponibilidad de objetos arrojadizos... los vecinos conviven pacíficamente sin apedrearse los unos con los otros.
Desde los medios de comunicación de masas se nos intenta paralizar con miedo, un miedo inducido que no es real y cuya única función es meternos en estado de shock para que nos estemos quietecitos ante el saqueo de derechos y libertades al que nos están sometiendo los que promocionan el discurso del miedo.
Tal vez las ciudades fantasma fruto del consumismo imperante de los últimos años sean fruto de la despoblación y del abandono. La vez las almendras centrales de ciertas ciudades sean polvorines a punto de estallar. No lo dudo. Pero la gente tiene que vivir en algún sitio (de alquiler o en propiedad, me da igual), necesita disponer de servicios, le gusta rodearse de más gente con la que compartir su vida...
Mi barrio es un barrio obrero de clase media, consolidado, con todos los servicios, parques, jardines, bien comunicado por tras*porte público, cercano a centros de trabajo...
Sí, posiblemente la presión por la subida del IVA y la desaparición de las deducciones por compra de vivienda sean el motor de las reformas. Pero es que hasta la inmobiliaria del barrio está en proceso de expansión: han colonizado un nuevo local y tienen la mayor flota de vehículos de toda la zona.
O tal vez la disponibilidad de pisos a precio asequible está permitiendo un cambio de tendencia. En lugar de salir del barrio hacia el PAU se están modificando las preferencias: el ahorro de poder ir al trabajo en bicicleta en lugar de en coche, tener a la familia cerca, disponer de comercio de proximidad... también pueden ser los motores de la reforma del barrio.
el precio de las cosas
Seguramente el mercado de la vivienda seguirá a la baja. Caída brusca en los próximos meses o lenta a medio plazo. Lo veremos. Lo que comprobado de julio hasta ahora es que en mi barrio el precio del pan se ha mantenido: los búlgaros que cobraban la barra a 20 céntimos ahora cobran 25 y la panadería "de toda la vida" que pedía 55 céntimos la barra ahora lo da a 50. Los primeros se acaban de instalar y supongo que los segundos están a cerrar o buscando otra fuente de ingresos para pagar la hipoteca de los hijos.
El caso es que sí, que en términos generales no es un buen momento para comprar vivienda, pero cada uno somos un caso particular y tenemos una situación concreta. Si se mira en el histórico del foro y se leen entrevistas, incluso recientes, con expertos en economía que vienen denunciando la burbuja desde el minuto -2, podemos hacernos una idea de lo que es un precio razonable para una vivienda y de cuando es el momento de comprar. El de cada uno. Evidentemente, hay para quien nunca es el momento, en función de las prioridades de cada cual será preferible disponer de movilidad o pagar cuotas de alquiler con ese dinero que no puede ingresar en el banco ni declarar en ninguna parte.
A día de hoy hay en el mercado viviendas muy baratas que no merece la pena comprar y viviendas anunciadas a precios a los que no se venderán nunca. Pero entre todo ese ruido hay posibilidad de encontrar algo que se ajuste a las necesidades, expectativas y capacidad de compra, cosa que no ocurría en fechas recientes. ¿Bajarán los precios? seguro. ¿Seguirá estando disponible mucho tiempo ese piso que te interesa?... si te compensa asumir el riesgo de esperar a que baje más es que no es tu piso.
¿qué pasa con el empleo?
El miedo a perder el empleo es una de las causas que me habían tenido apartado de la compra de vivienda. Por diversos motivos que no voy a detallar, últimamente he compartido tiempo con bastantes personas en situación de desempleo. Y he descubierto que en este país desempleo no es sinónimo de falta de ingresos. La economía sumergida está a un nivel impensable para un trabajador por cuenta ajena que no esté atento a lo que pasa a su alrededor.
A día de hoy, con la precariedad laboral imperante y el marco legal vigente, es más rentable para gran parte de los parados seguir cobrando la prestación que arriesgarse a perder el derecho de cobrarla con un empleo temporal y mal remunerado. ¿Egoísta? no, una decisión económica racional.
Especialmente si consideramos la ingente cantidad de oportunidades que hay para adornarse esa prestación o el subsidio. Desde las ayudas que se dan para realizar cursos para desempleados, a chapuzas y pequeños encargos , en cualquier profesión y empresa, que se asignan y que se pagan en un sobre para evitar obligaciones laborales y ahorrar impuestos. No hablo sólo de bajar sacos de escombro, buzonear, fregar escaleras o dar clases particulares. Hablo de trabajos puntuales o no tanto que van de dibujar planos a mantener páginas web, redactar noticias especializadas o participar en foros como este. Sin olvidar, claro está, el trapicheo de drojas o la prespitación. O los gorrillas, actividad que da para vivir a un buen número de personas en toda la geografía nacional.
Sí, tenemos mucho paro, pero es más por culpa de salarios bajos y malas condiciones laborales, así como por la tolerancia de las autoridades con la economía sumergida, que por falta de actividad real. El dinero se mueve, pero escapa al fisco y eso es lo que seca las arcas públicas por encima de cualquier otra consideración. O conseguimos que los políticos se tomen esto en serio o nos liberamos del yugo, pero la esquizofrenia de pagar impuestos para no recibir nada a cambio es el mal que acecha a la masa de trabajadores por cuenta ajena que mantiene el estado del bienestar.
de la gestión empresarial como fuente de crisis
A lo anterior tengo que añadir que parte de la crisis que he observado es debido al oportunismo empresarial: las empresas están aprovechando para soltar lastre. Tiran de su plantilla al personal sin mucho criterio, o con criterio monetario, despido a los que más me cuestan.
Resultado: que ahora mismo hay empresas que no dan abasto con el trabajo, tienen poco personal para atender la demanda de servicios o personal tan poco experimentado o tan mal cualificado que no pueden satisfacer adecuadamente las necesidades del cliente. Eso sí, sus becarios cobran poco y protestan menos.
Así pues, si quieres un instalador lo mejor es que lo busques fuera de las empresas distribuidoras ya que estas no tienen plantilla ni tampoco sus contratas. Los empleados eficientes están cobrando el paro y sacándose un extra por su cuenta. Si quieres los buscas y vienen a hacer el trabajo cobrando en un sobre o esperas plazos que el suministrador oficial va alargando cada vez más.
Eso por no contar con los fallos imperdonables en la calidad de los productos manufacturados: todo el mundo, desde el cristalero hasta la cadena de electrodomésticos intentan colocarte pufos constantemente ¿cómo no vamos a primar la marca blanca y el precio bajo en un escenario en el que nada es lo que parece y todo está hecho para durar una temporada?
El trabajo no es más que una forma de conseguir ingresos y el sistema está evolucionando. De una parte vamos por la senda del decrecimiento, por lo que cada vez necesitamos más ingresos. Por otro lado la estructura productiva y las necesidades están variando por lo que cada vez hay más oportunidades de conseguir ingresos de forma alternativa a un horario canalla, un jefe cabrón y unos compañeros insufribles. Las empresas están concentrado más incompetentes por metro cuadrado que nunca y eso les va a pasar factura en breve si es que no se la esta pasando ya.
la crisis en burbuja.info
Hace tiempo que leo el foro, hace unos años era la única forma de encontrar información contrastada sobre la situación económica en general y la del mercado inmobiliario en particular. Había debate y argumentación con distintas posturas sobre el tema.
Pero de un tiempo a esta parte se han ido haciendo con el foro los distintos agentes del poder político y económico, de modo que trasladan aquí los mensajes que ya vienen volcando en los medios de comunicación tradicionales y tratan de utilizar el foro como herramienta para mantener su posición y mover la opinión pública en contra del adversario.
A estos se les han sumado, ya estaban antes, pero ahora lo hacen de forma descarada, toda una suerte de oportunistas carroñeros en busca del dinero del pequeño ahorrador, bien para llamar su atención sobre la posibilidad de contratar servicios para ser asesorados sobre qué hacer con sus capitales, bien para condicionar sus inversiones de modo que no estorben a sus intereses o a los intereses de sus clientes actuales.
Mal están los que vienen animando al personal a comprar pisos como si no pasase nada, pero los que promocionan las armas de fuego como si se llevasen comisión, los agoreros y apóstoles del último día también se pasan tres pueblos y sobran en el foro. Pero cada cual tiene sus intereses y la mejor forma de lograrlos es inducir el miedo al resto para manejarnos a todos a su antojo. La cantidad de usuarios del foro es una masa crítica que podría ayudar a ganar elecciones, mover demandas, posicionar productos... el rebaño es dócil.
Aquí se han juntado muchas ovejas y los pastores están reunidos...
una conclusión final
Hay que ser críticos y evitar que nos amansen. Quieren que estemos bajo su mando y harán lo impensable con tal de mantenerse con el ojo ciego caliente sobre sus sillones.
Puede ser lógico que después de 12 horas dedicadas al curro, y otras pocas de tele, no nos apetezca luchar para cambiar la situación, pero lo que no es normal es que invirtamos nuestros esfuerzos en seguir el juego de los que nos saquean.
para no perderse, esta chapa se divide en:
- mi historieta (intro rollo y chapa, lo siento, pueden saltársela, a no ser que tengan por deporte el tiro al pepito, les dará juego)
- el mercado inmobiliario se mueve, al menos en mi barrio
- el precio de las cosas
- ¿qué pasa con el empleo?
- de la gestión empresarial como fuente de crisis
- la crisis en burbuja.info
- una conclusión final
mi historieta
Hace tiempo que la gente de mi entorno me decía que debía dejar el pesimismo y mirar a mi alrededor, que la situación no está tan mal como en esos foros y blogs que lees en internet. Yo vivía felizmente de alquiler. Mi primera opción había sido la compra de vivienda, pero a pesar de tener una formación, empleo e ingresos bastante más que decentes me parecía impensable hipotecarme en las circunstancias en las que lo hacían mis amigos y conocidos, implicando a lafamilia y el resto de su vida en una deuda inmensa... si no podía pagar un piso en propiedad había que buscar alternativas racionales: alquiler al canto.
De vez en cuanto miraba las páginas de anuncios de pisos, me acercaba a alguna inmobiliaria... llamaba a algún anuncio colgado en la ventana de algún piso que me parecía interesante... la locura burbujista primero, el nuncabajismo después y el poco bajismo que siguió me hicieron perder el interés en la vivienda en propiedad y me hice fuerte en mi pisito de alquiler: un tercio de mis ingresos netos, tres dormitorios, relativamente bien ubicado...
Hasta este mes de julio, en que, por casualidad me tropecé con un piso que me gustaba, similar al piso en el que estaba de alquiler, pero en mejor finca, rodeado de jardines... A la venta, después de apretar al anunciante (particular a particular, sin intermediarios), en un precio cuatro veces mis ingresos brutos anuales... pregunté por hipoteca, reservando una partida de mis ahorros para la reforma, no suponía más del 70% del precio de compra - venta, cuotas por un tercio de mis ingresos netos a diez años... me decidí a comprar. Y a reformar, aquí es donde viene lo bueno.
La gente que se alegró de que tomase la decisión de comprar aseguraba que la reforma me saldría muy barata y la haría muy deprisa por la situación económica. Nada de eso. Sí es cierto que los materiales me los sirvieron en un plazo bastante rápido y que he encontrado ofertas bastante razonables para algunas cosas, pero la tónica general en la crisis es que el personal prefiere que no se acuerden de ellos a la hora de trabajar.
Antes de iniciar la reforma pedí varias ofertas. Terminada la reforma, algunos presupuestos todavía no me han llegado. De los que recibí dos eran "nacionales" y tres de la europa del este. En precio andan todos más o menos igual, la pega es cómo se plantean:
- El que más confianza me daba y mejor había entendido cómo quería realizar la reforma (nacional) no trabajaba en agosto.
- El otro nacional quería hacer la reforma a su gusto y cantaba por todas partes que de donde sacaba la mayor parte de su beneficio era inflando el precio de las materias primas, hasta el extremo de que no me hacía la preinstalación del aire acondicionado si no me ponía las máquinas.
- Uno de los procedentes de países recién incorporados a la UE me presupuestaba únicamente mano de obra. Este presupuesto me servía para tener un criterio en este sentido, pero al carecer de la infraestructura logística y el tiempo necesario para encargarme de comprar y tras*portar todos los materiales no me valía. A pesar de ser el más competitivo de todos los presupuestos.
- Ente los otros dos la decisión fue un poco al azar, eran serios, tenían medios y experiencia, precios intermedios y ganas de trabajar.
En resumen, el emprendedor patrio sigue pensando que puede estafar al cliente inflando precios por cosas que el propio cliente puede comprar por su cuenta o bien puede planificarse su vida sabiendo qué carga de trabajo quiere soportar para permitirse unas vacaciones de vez en cuando.
Una observación: el precio de los suministros de fontanería a subido desde julio hasta ahora, al menos un combinado de ducha que he tenido que cambiar se oferta ahora por un tercio más de su precio hace unos meses y lo mismo con un embellecedor que no compré en su día a 6 euros y por el que ahora me roban 14.
---(fin de la intro chapa, ahora el resto del rollo)---
el mercado inmobiliario se mueve, al menos en mi barrio
Lejos del baile de las cifras y los mensajes catastrofistas, en cualquier calle de mi barrio se puede encontrar con facilidad un contenedor de obra repleto de cascotes. Cualquier manzana tiene su correspondiente piso en plena reforma. Y a pesar de la disponibilidad de objetos arrojadizos... los vecinos conviven pacíficamente sin apedrearse los unos con los otros.
Desde los medios de comunicación de masas se nos intenta paralizar con miedo, un miedo inducido que no es real y cuya única función es meternos en estado de shock para que nos estemos quietecitos ante el saqueo de derechos y libertades al que nos están sometiendo los que promocionan el discurso del miedo.
Tal vez las ciudades fantasma fruto del consumismo imperante de los últimos años sean fruto de la despoblación y del abandono. La vez las almendras centrales de ciertas ciudades sean polvorines a punto de estallar. No lo dudo. Pero la gente tiene que vivir en algún sitio (de alquiler o en propiedad, me da igual), necesita disponer de servicios, le gusta rodearse de más gente con la que compartir su vida...
Mi barrio es un barrio obrero de clase media, consolidado, con todos los servicios, parques, jardines, bien comunicado por tras*porte público, cercano a centros de trabajo...
Sí, posiblemente la presión por la subida del IVA y la desaparición de las deducciones por compra de vivienda sean el motor de las reformas. Pero es que hasta la inmobiliaria del barrio está en proceso de expansión: han colonizado un nuevo local y tienen la mayor flota de vehículos de toda la zona.
O tal vez la disponibilidad de pisos a precio asequible está permitiendo un cambio de tendencia. En lugar de salir del barrio hacia el PAU se están modificando las preferencias: el ahorro de poder ir al trabajo en bicicleta en lugar de en coche, tener a la familia cerca, disponer de comercio de proximidad... también pueden ser los motores de la reforma del barrio.
el precio de las cosas
Seguramente el mercado de la vivienda seguirá a la baja. Caída brusca en los próximos meses o lenta a medio plazo. Lo veremos. Lo que comprobado de julio hasta ahora es que en mi barrio el precio del pan se ha mantenido: los búlgaros que cobraban la barra a 20 céntimos ahora cobran 25 y la panadería "de toda la vida" que pedía 55 céntimos la barra ahora lo da a 50. Los primeros se acaban de instalar y supongo que los segundos están a cerrar o buscando otra fuente de ingresos para pagar la hipoteca de los hijos.
El caso es que sí, que en términos generales no es un buen momento para comprar vivienda, pero cada uno somos un caso particular y tenemos una situación concreta. Si se mira en el histórico del foro y se leen entrevistas, incluso recientes, con expertos en economía que vienen denunciando la burbuja desde el minuto -2, podemos hacernos una idea de lo que es un precio razonable para una vivienda y de cuando es el momento de comprar. El de cada uno. Evidentemente, hay para quien nunca es el momento, en función de las prioridades de cada cual será preferible disponer de movilidad o pagar cuotas de alquiler con ese dinero que no puede ingresar en el banco ni declarar en ninguna parte.
A día de hoy hay en el mercado viviendas muy baratas que no merece la pena comprar y viviendas anunciadas a precios a los que no se venderán nunca. Pero entre todo ese ruido hay posibilidad de encontrar algo que se ajuste a las necesidades, expectativas y capacidad de compra, cosa que no ocurría en fechas recientes. ¿Bajarán los precios? seguro. ¿Seguirá estando disponible mucho tiempo ese piso que te interesa?... si te compensa asumir el riesgo de esperar a que baje más es que no es tu piso.
¿qué pasa con el empleo?
El miedo a perder el empleo es una de las causas que me habían tenido apartado de la compra de vivienda. Por diversos motivos que no voy a detallar, últimamente he compartido tiempo con bastantes personas en situación de desempleo. Y he descubierto que en este país desempleo no es sinónimo de falta de ingresos. La economía sumergida está a un nivel impensable para un trabajador por cuenta ajena que no esté atento a lo que pasa a su alrededor.
A día de hoy, con la precariedad laboral imperante y el marco legal vigente, es más rentable para gran parte de los parados seguir cobrando la prestación que arriesgarse a perder el derecho de cobrarla con un empleo temporal y mal remunerado. ¿Egoísta? no, una decisión económica racional.
Especialmente si consideramos la ingente cantidad de oportunidades que hay para adornarse esa prestación o el subsidio. Desde las ayudas que se dan para realizar cursos para desempleados, a chapuzas y pequeños encargos , en cualquier profesión y empresa, que se asignan y que se pagan en un sobre para evitar obligaciones laborales y ahorrar impuestos. No hablo sólo de bajar sacos de escombro, buzonear, fregar escaleras o dar clases particulares. Hablo de trabajos puntuales o no tanto que van de dibujar planos a mantener páginas web, redactar noticias especializadas o participar en foros como este. Sin olvidar, claro está, el trapicheo de drojas o la prespitación. O los gorrillas, actividad que da para vivir a un buen número de personas en toda la geografía nacional.
Sí, tenemos mucho paro, pero es más por culpa de salarios bajos y malas condiciones laborales, así como por la tolerancia de las autoridades con la economía sumergida, que por falta de actividad real. El dinero se mueve, pero escapa al fisco y eso es lo que seca las arcas públicas por encima de cualquier otra consideración. O conseguimos que los políticos se tomen esto en serio o nos liberamos del yugo, pero la esquizofrenia de pagar impuestos para no recibir nada a cambio es el mal que acecha a la masa de trabajadores por cuenta ajena que mantiene el estado del bienestar.
de la gestión empresarial como fuente de crisis
A lo anterior tengo que añadir que parte de la crisis que he observado es debido al oportunismo empresarial: las empresas están aprovechando para soltar lastre. Tiran de su plantilla al personal sin mucho criterio, o con criterio monetario, despido a los que más me cuestan.
Resultado: que ahora mismo hay empresas que no dan abasto con el trabajo, tienen poco personal para atender la demanda de servicios o personal tan poco experimentado o tan mal cualificado que no pueden satisfacer adecuadamente las necesidades del cliente. Eso sí, sus becarios cobran poco y protestan menos.
Así pues, si quieres un instalador lo mejor es que lo busques fuera de las empresas distribuidoras ya que estas no tienen plantilla ni tampoco sus contratas. Los empleados eficientes están cobrando el paro y sacándose un extra por su cuenta. Si quieres los buscas y vienen a hacer el trabajo cobrando en un sobre o esperas plazos que el suministrador oficial va alargando cada vez más.
Eso por no contar con los fallos imperdonables en la calidad de los productos manufacturados: todo el mundo, desde el cristalero hasta la cadena de electrodomésticos intentan colocarte pufos constantemente ¿cómo no vamos a primar la marca blanca y el precio bajo en un escenario en el que nada es lo que parece y todo está hecho para durar una temporada?
El trabajo no es más que una forma de conseguir ingresos y el sistema está evolucionando. De una parte vamos por la senda del decrecimiento, por lo que cada vez necesitamos más ingresos. Por otro lado la estructura productiva y las necesidades están variando por lo que cada vez hay más oportunidades de conseguir ingresos de forma alternativa a un horario canalla, un jefe cabrón y unos compañeros insufribles. Las empresas están concentrado más incompetentes por metro cuadrado que nunca y eso les va a pasar factura en breve si es que no se la esta pasando ya.
la crisis en burbuja.info
Hace tiempo que leo el foro, hace unos años era la única forma de encontrar información contrastada sobre la situación económica en general y la del mercado inmobiliario en particular. Había debate y argumentación con distintas posturas sobre el tema.
Pero de un tiempo a esta parte se han ido haciendo con el foro los distintos agentes del poder político y económico, de modo que trasladan aquí los mensajes que ya vienen volcando en los medios de comunicación tradicionales y tratan de utilizar el foro como herramienta para mantener su posición y mover la opinión pública en contra del adversario.
A estos se les han sumado, ya estaban antes, pero ahora lo hacen de forma descarada, toda una suerte de oportunistas carroñeros en busca del dinero del pequeño ahorrador, bien para llamar su atención sobre la posibilidad de contratar servicios para ser asesorados sobre qué hacer con sus capitales, bien para condicionar sus inversiones de modo que no estorben a sus intereses o a los intereses de sus clientes actuales.
Mal están los que vienen animando al personal a comprar pisos como si no pasase nada, pero los que promocionan las armas de fuego como si se llevasen comisión, los agoreros y apóstoles del último día también se pasan tres pueblos y sobran en el foro. Pero cada cual tiene sus intereses y la mejor forma de lograrlos es inducir el miedo al resto para manejarnos a todos a su antojo. La cantidad de usuarios del foro es una masa crítica que podría ayudar a ganar elecciones, mover demandas, posicionar productos... el rebaño es dócil.
Aquí se han juntado muchas ovejas y los pastores están reunidos...
una conclusión final
Hay que ser críticos y evitar que nos amansen. Quieren que estemos bajo su mando y harán lo impensable con tal de mantenerse con el ojo ciego caliente sobre sus sillones.
Puede ser lógico que después de 12 horas dedicadas al curro, y otras pocas de tele, no nos apetezca luchar para cambiar la situación, pero lo que no es normal es que invirtamos nuestros esfuerzos en seguir el juego de los que nos saquean.
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