Pues que Messi se busque otros amigos dentro del vestuario, que iba todo el dia pegado a Súarez y ni saludaba a los demás. Que a veces parece realmente autista. El siempre cuenta que cuando lo subieron al primer equipo se sintió muy arropado por el grupo de los brasileños formado por Ronaldinho, Deco, Motta y alguno más, y no parece que él esté haciendo ese mismo papel de mentor con los jovenes que van llegando.
Y ojalá Súarez se hubiera podido despedir en el campo con el estadio lleno y coreando su nombre, pero entre el el bichito y el bichito Bartomeu pues no ha podido ser. Pero le han permitido irse al club que ha querido y cobrando una buena parte del salario que le faltaba, así que no se puede quejar Súarez demasiado, las formas no han sido las mejores pero ha salido bien parado. Cuando vuelva con el Atlético si ya puede entrar público que se le haga un pequeño homenaje antes del comienzo del partido para que pueda despedirse de la afición como se merece.