Actualizo con esto de Joan Canadell. Más que una predicción es más bien un deseo por partida doble: que concedan a Barcelona los juegos olímpicos de invierno de 2030 y que por aquel entonces Cataluña sea ya independiente.
Oiga, a falta de pan buenas son tortas, que ya no se estilan las grandes predicciones con precisión de día, mes y año. Supongo que no querrán volver a quedar en ridículo.
Oiga, a falta de pan buenas son tortas, que ya no se estilan las grandes predicciones con precisión de día, mes y año. Supongo que no querrán volver a quedar en ridículo.