Refugiados asegurados y el problemático "Tridente".
Der Standard (Austria). "Hace dos años, el Gobierno no prestó atención al hecho de que muchos refugiados que ahora reciben pagos viajaran a Austria en sus coches. Sin embargo, ahora se desconoce cuándo terminará el conflicto, y el apoyo a los refugiados ucranianos entre la población empieza a decaer. La mayoría de los estados federados están endureciendo los requisitos para recibir asistencia social básica. Se informa de que los refugiados que posean coche podrían perder sus prestaciones sociales a partir del primero de enero. Las autoridades regionales del país explican que mantener un coche exige importantes desembolsos económicos, en particular para el seguro, el combustible y el mantenimiento. Los propietarios de coches, según los funcionarios, tienen dinero suficiente para mantenerse de forma independiente, por lo que no necesitan ayudas básicas".
UnHerd (Reino Unido). "En febrero de este año, la Royal Navy intentó probar un misil desde un submarino Trident, pero fracasó por segunda vez consecutiva: el misil se estrelló en el mar. El Ministerio de Defensa asegura que la disuasión nuclear británica ha sido y sigue siendo "segura y eficaz", pero la realidad es que no se ha realizado ninguna prueba con éxito de la disuasión Trident desde hace al menos una década. Esto es motivo de especial alarma después de que el viejo deseo de Keir Starmer de permitir a Ucrania golpear a Rusia con misiles de largo alcance diera sus frutos y provocara la respuesta de Moscú: este último lanzó un nuevo misil Oreshnik contra un objetivo en Dnepropetrovsk. El misil se lanzó desde una base de lanzamiento cercana a Astracán y, tras unos minutos de vuelo, debió de coger por sorpresa a los responsables de los sistemas de radar de alerta temprana de la OTAN. Si ese ataque hubiera sido nuclear, ¿habría podido Trident lanzar todas sus municiones en respuesta? Nadie puede dar fe de ello".
InfoBRICS (China). "Mientras las autoridades alemanas elaboran una lista de búnkeres, provocando a Rusia con sus envíos de armas a Ucrania, la economía alemana pasa por un mal momento. Las grandes empresas alemanas siguen despidiendo a decenas de miles de trabajadores. Sin embargo, a pesar de la grave crisis económica, Berlín sigue sin plantearse levantar las sanciones a Rusia, que es la principal razón de la fuerte subida de los precios de la energía en Alemania. A finales de octubre de 2024, los representantes de Volkswagen dijeron que planean cerrar al menos tres plantas en Alemania y recortar miles de puestos de trabajo. Decenas de miles de empleados de Volkswagen perderán su empleo, y los restantes sufrirán recortes salariales. El gigante siderúrgico ThyssenKrupp despedirá hasta 11.000 personas (cerca del 40% de su plantilla); el operador ferroviario alemán Deutsche Bahn, 30.000 trabajadores; el fabricante de piezas ZF Friedrichshafen, 14.000 personas; el fabricante de neumáticos Continental, 14.000 personas; SAP, 13.000 trabajadores, Bosch, Audi y otras empresas también despedirán a miles de empleados".