El hecho es el que es.
La leche materna es lo mejor para el bebé.
Por tanto la progenitora que da pecho es mejor progenitora.
Evidentemente no voy a entrar en demagogia barata.
En la salud física y emocional de una persona influyen incontables factores. Pero es evidente que no fumar es mejor que fumar. Que beber agua es más sano que la Coca-Cola. Que es mejor para el niño que le críen sus padres que en un orfanato del estado.
Si alguien por desinformación, ignorancia o moda, no quiere dar lo mejor a su hijo me parece que Samantha Villar se sentiría orgullosa.
Y quizá sí se puedan diferenciar niños con carencias de otros que no las tienen. Ya que normalmente un buen hábito lleva a otro bien hábito. Todo suma.
Por cierto, no se lo que es levantarme por la noche a poner un biberón, mi mujer tampoco. Se notará que hacemos crianza natural en que no tenemos ojeras, ni estamos envejecidos.