Verá usted.
Resulta que yo tengo mi vida y prosperidad montada en un sitio bonito donde la gente vive de la agricultura, la pesca y el turismo.
Y ahora vienen unos de fuera hablándome de prosperidad, la suya claro, y dicen que vivo sobre toneladas de mineral xxxx que valen miles de millones de euros. Y que mi prosperidad se tiene que ir a la cosa, y que me pagan el terreno a unos pocos miles de euros porque dicen que es rústico y que sólo da hierba para que las vacas pasten.
Hoyga, un momento: ¿No hay debajo algo que vale miles de millones de euros?. Pues me das un par de ellos y me voy con la música a otra parte a buscarme yo la prosperidad.
Pues no, hamijo, si no pasas por el aro, meto a la Administración a expropiar por cuatro cortesanas, porque pagar minolles a todo el pueblo es caro por la parte contratante de la otra parte contratante, y entonces hay que descontar los bonus a los directivos y eso en la bolsa se ve muy mal.
Y yo digo: Bueno, me contrataríais entonces... Pues igual sí, por 1500 euros al mes, que en estas zonas rurales ya sabes que los suelditos no son muy altos, y a través de subcontrata.
Pues no me interesa hoyga, porque yo tengo ya mi prosperidad montada y vivo bien de alquilar la otra casita en los veranos. Y si acepto tu oferta, me destrozáis todo, me envenenáis el agua y la pesca, las vacas y el turismo se van a tomar por el ojo ciego. Además esto es zona protegida. Ya sé que habéis untado al alcalde y a algunos vecinos, pero va a dar igual porque esto lo lleva Medio ambiente y no va a ser tan fácil. Y esto es un pueblo pequeño, y nos conocemos todos, y salvo cuatro a los que estáis pagando, y alos que ya hemos rajado las ruedas, todos estamos de acuerdo. Al alcalde le queda medio telediario porque nos lo vamos a amar en las elecciones.
Como usted comprenderá, eso de la prosperidad depende de con quién estemos hablando, y si hablamos de que vivo sobre miles de millones de euros, me sabe mal que me jodáis la vida y el negocio por unos pocos miles, para que los millones se los lleven unos canadienses y unos castuzos de Madrid y de la capital de la Provincia. Porque yo también tengo mi prosperidad, y si me intentas jorobar, te la voy a intentar arruinar, a ti y a tu puñetero jefe canadiense.
Como usted comprenderá, no hay nada de malo ni de psicopático en la defensa del negocio propio y del modo de vida de cada uno, y si encima la mayoría de los vecinos comparten ese sentimiento, pues el minero canadiense lo tiene estropeado. Eso sí, ellso tienen muchos más medios, así que si ellso van sobornando y amedrentando, pues como yo no puedo sobornar, también sé amedrentar, a los traidores y vendidos, porque donde las dan las toman.
Y fíjese que no hablo de no colaborar, sencillamente digo que si soy pieza indispensable de un negocio millonario, pues quiero mi parte: dejas de pagar a castuzos de Madrid, y sueltas los millones a la gente del pueblo. ¿Qué hay de malo en ello?. Y si no, pueden irse a tomar por el ojo ciego las mineras y sus tierras raras de las narices.
Respecto a la prosperidad que arruino, veo que no has tenido cerca una explotación minera de esas: ya te digo yo lo que aporta a los vecinos: tóxicos, enfermedades respiratorias, destrozo del entorno y cierre después de 15 años. Balance final, el municipio es más pobre y tiene más desempleo que los vecinos que se subieron al carro del turismo entre tanto. ¿Se generó riqueza? ni idea, nadie en el municipio la vio. Supongo que unos extranjeros y unos castuzos locales son mucho más ricos.
Te lo digo porque lo he vivido.
Rajada de ruedas incluída.
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