Muy bien explicado. Aunque yo añadiría algo más que se ve en países presidencialistas. Es la famosa mayoría del 51%. Es decir, que sólo les hace falta amañar, engañar, comprar votos... Para obtener ese 51%. Luego puedes sacar las leyes que quieras de más arriba.
Pongo dos ejemplo recientes. El primero. En las presidenciales de Brasil. Se olía cierto tongo en la segunda vuelta. Vale que los candidatos ninguno era trigo limpio (eran títeres de ambos espectros políticos). Pero ganó por la mínima, tras fracasar Lula en la primera vuelta. Bolsonaro se puso de perfil como pasó con Rajoy, Aznar, etc... Es decir, cuando les dijeron que se iba y tocaba "al otro". Pero ese supuesto 49% que perdió salió a las calles a pedir justicia. Contar actas, se fueron a los cuarteles a pedir ley marcial, etc... Al final nada. Los de arriba dijeron que tocaba al otro y punto. Si diéramos por válida esa victoria, el 51% de la gente domina al otro 49%.
Uno de hace nada. El referéndum de Moldavia para entrar en la UE. Iba ganando el no, pero al final se le da la vuelta (índice de fraude). Pues parece que la presidenta ha dicho que con el 51% de los votos a favor, dan por válido ingresar a la Unión Europea. Es decir, que la mitad decide supuestamente por la otra mitad en algo que puede cambiar sus vidas. Algo que es muy injusto (encima amañado)
Ni te hace falta mayoría de 2/3, ni nada similar en muchas ocasiones. Mismamente en el congreso/senado de EE.UU, con tener comprados a ciertos políticos, para obtener ese 51% ya les vale para sacar sus leyes adelante. Con cosas que afectan a la mayoría, amañan/compran candidatos para obtener ese pírrico 51% y listo.