Beriaru
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Venga, citame donde dice nada de lo que expones en el artículo. Espero tu cita.
Si existe el derecho a asociarse. Tambien el derecho a no ser discriminado y por supuesto como dices a las injurias y calumnias. ¿y?
¿Que te molesta que se asocien?
Porque tu mensaje carece de sentido, en ningun momento han dicho esto que dices. Vienen a denunciar unas situaciones concretas a influir en la opinión y la sensibilidad a base de sensibilización, ¿pero donde dicen esto que expones?
Si te ha molestado mi mensaje y me contestas: ¿A donde vas? Manzanas traigo.
Explicate mejor, porque sigue sin tener ningun sentido tu mensaje con respecto al mio. Admite que te has ido por peteneras porque no puedes contestar a mi afirmación que es básicamente que la empatia y el respeto se cultiva, que te metes en la vida de como se deben sentir otros sin tener ni idea y que te joroba que se asocien o porque eres un gordifobico, sino no se entiende tal respuesta.
Pero saltas con el derecho a soltar insensateces, vamos ridiculo. Lo que si veo es que precisamente tu tienes la piel muy fina, lo mio tambien es una verdad objetiva. Como tu dices: Tienes que jorobarte. Que conste que no lo digo yo, lo has dicho tu mismo.
¿Te molesta que diga rellenitofobico o marujo? Según tu criterio, se siente.
Lo que te he explicado y parece que no entiendes, es que la rellenitofobia solo existe en la cabeza de los que acusan a otros de serlo. Si estas obeso, en un 99,9% de los casos es por ELECCIÓN. Y si te molesta que te señalen como obeso, quiere decir que no estás orgulloso de dicha elección. Elección que tomaste TÚ. Ergo: eres rellenitofobico.
Cualquier persona sana y equilibrada, ante dicha circunstancia intentaría corregirse. Pero no, es más fácil EXIGIR que los demás vivan en una realidad paralela, mientan y obvien lo evidente, para no sentirse ofendido.
Estar obeso NO ES SANO, como tampoco lo es vivir en una mentira, o comportarte cómo un crío negando la realidad. Esa gente tiene que crecer, apechugar con su vida, tomar responsabilidad de sus decisiones, y dejar de culpar a los demás de sus autoinflingidas desgracias. Desgracia que ellos mismos identifican con su obesidad, hablando de rellenitofobias.
En vez de exigir que los demás se corrijan para no herir tus delicados sentimientos, tienes la opción de corregirte tú. Crece y madura, ya no eres un crío.