¿La conexión a tierra o la toma de tierra protegen de la radiación EMF?
28 de enero de 2019 por Daniel T. DeBaun: ingeniero, autor y ejecutivo de telecomunicaciones
¿La conexión a tierra protege contra la radiación EMF?
Desde interminables correos electrónicos de trabajo y horas dedicadas a navegar por las redes sociales, hasta el constante aluvión de cobertura mediática ininterrumpida, ahora más que nunca estamos abrumados por las constantes distracciones de la tecnología .
Nuestros dispositivos móviles electrónicos se han convertido más en una necesidad que en un lujo.
Aunque tienen muchos beneficios, esta tecnología emite radiación EMF y puede interferir con las frecuencias naturales de nuestro cuerpo y se ha relacionado con una cantidad cada vez mayor de efectos negativos para la salud .
Somos seres bioeléctricos en un planeta eléctrico
Nuestros cuerpos funcionan eléctricamente . Por ejemplo, nuestro corazón, pulmones y cerebro envían señales eléctricas a través de nuestro sistema nervioso para ayudarnos a bombear sangre, respirar y movernos.
Curiosamente, nuestros cuerpos se parecen más a la Tierra en la que vivimos de lo que imaginas.
La Tierra tiene su propio latido único , también conocido como Resonancia Schumann , que se refiere a la frecuencia natural del campo electromagnético del planeta y pulsa continuamente a 7,83 Hz . Esta frecuencia puede alcanzar hasta 16,5 Hz variando con los cambios de estaciones, erupciones solares y otros fenómenos terrestres.
Desde que comenzó la vida en nuestro planeta, la biología de cada ser vivo ha estado en sintonía con este campo sutil. La resonancia Schumann fue teorizada por primera vez en la década de 1950 por el físico alemán WO Schumann. Predijo una serie de vibraciones de baja frecuencia causadas por descargas de rayos entre la tierra y la ionosfera de la Tierra.
Al descubrir que la frecuencia fundamental de la Tierra de 7,83 Hz es muy cercana a la de los ritmos de las ondas alfa humanas, el estudiante de doctorado de Schumann, Herbert König, asoció la Resonancia Schumann con la bioactividad humana .
En nuestro cerebro, las ondas alfa abarcan el rango de frecuencia de 7,5 a 12,5 Hz, que es casi la misma frecuencia del latido natural del corazón de la Tierra. Estas ondas alfa están presentes en nuestro cerebro durante el sueño temprano, la relajación profunda, los sueños y la meditación. Estas ondas ayudan a regenerar las células y promover la curación en nuestros cuerpos y se ha demostrado que promueven la coordinación mental, la calma, el estado de alerta, la conciencia interior, la integración mente/cuerpo y el aprendizaje.
Dado que las ondas alfa en nuestro cerebro se parecen mucho a la resonancia Schumann, estas frecuencias combinadas actúan como una forma de sincronización ambiental. Sin embargo, cuando se altera la sincronicidad, nuestra salud puede verse afectada.
Frecuencias naturales vs. Campos electromagnéticos (EMF) creados por el hombre
La frecuencia natural de nuestro planeta emite iones cargados negativamente . Tendemos a pensar que positivo significa “bueno”, pero en términos de iones, los iones negativos en realidad son mejores para nosotros. Estos iones se crean en la naturaleza por los efectos del agua, el aire y la luz solar sobre el campo electromagnético inherente de la Tierra.
Debido al agua y los minerales dentro de nosotros, nuestros cuerpos posteriormente existen en un estado ionizado negativo , lo que nos hace muy conductores. Por esa razón, funcionamos mejor cuando estamos continuamente expuestos y en sintonía con las frecuencias naturales de la Tierra.
Desafortunadamente, en nuestra sociedad moderna, es posible que nos encontremos en interiores la mayor parte del tiempo, lo que nos aísla de la Tierra y su frecuencia. Cuando nos aventuramos afuera, nuestra conexión con la Tierra se ve bloqueada por la presencia de zapatos con suela de goma. Nuestras camas están elevadas del suelo y las ruedas de goma de las bicicletas y los automóviles impiden que las frecuencias naturales de la Tierra lleguen a nuestros cuerpos.
Además, la tecnología que utilizamos es ajena a nuestra biología y altera estas frecuencias naturales . Los dispositivos móviles inalámbricos y las fuentes WiFi de nuestro entorno emiten campos electromagnéticos artificiales o, para abreviar, radiación EMF. Esta forma antinatural de campos electromagnéticos puede causar una variedad de respuestas en el cuerpo relacionadas con el estrés, como hipersensibilidad .
Cuando utilizamos constantemente dispositivos móviles cerca de nuestro cuerpo durante largos períodos de tiempo, la exposición a la radiación EMF puede volverse dañina.
Los estudios han encontrado vínculos entre la exposición a los campos electromagnéticos y problemas de salud menores, como dolores de cabeza y erupciones cutáneas, con problemas muy graves, como problemas de fertilidad , fragmentación del ADN, daño celular y tumores cancerosos .
La exposición a los campos electromagnéticos no sólo tiene impactos térmicos y biológicos en nuestros cuerpos, sino que los dispositivos electrónicos emiten iones cargados positivamente . Las altas concentraciones de iones positivos (también conocidos como oxidantes o radicales libres ) de los campos electromagnéticos alteran la frecuencia natural de nuestro cuerpo, lo que puede ser perjudicial para nuestra salud.
Tenemos una nota positiva: cuando estamos en contacto directo con la superficie de la Tierra, los iones cargados negativamente se tras*fieren a nuestro cuerpo, lo que puede ayudar a neutralizar los oxidantes cargados positivamente . Esto puede ayudar a reducir la inflamación y mejorar nuestra sensación general de bienestar. Esta tras*ferencia de energía por contacto directo con la superficie de la Tierra se denomina apropiadamente " puesta a tierra ", o más comúnmente conocida como " puesta a tierra ".
¿Qué es la puesta a tierra y la toma de tierra?
En el campo de la ingeniería eléctrica, puesta a tierra y toma de tierra tienen algunas pequeñas diferencias de significado. Pero en términos de que los humanos se conecten a la frecuencia sutil de la Tierra, las dos palabras se usan indistintamente. Los humanos han estado enraizados durante millones de años, evolucionando como especie en conexión con la frecuencia y energía naturales de la Tierra.
La conexión a tierra fue descubierta a finales de los años 1990 por un ejecutivo jubilado de la industria del cable, Clint Ober . Después de retirarse del negocio del cable, notó que la gente usaba zapatos de plástico y goma que aíslan nuestros cuerpos de la Tierra y se preguntó si esta desconexión entre el cuerpo y la Tierra podría afectarnos.
Ober tenía un amplio conocimiento de los aspectos técnicos de los sistemas de cables terrestres y sabía que estos sistemas necesitaban protección contra otras señales electromagnéticas en el entorno natural, de lo contrario habría interferencias en la tras*misión del cable. Experimentó primero con él mismo y luego con otros, prediciendo que la misma influencia estabilizadora de la conexión a tierra utilizada en las telecomunicaciones por cables también podría mejorar el bienestar al reducir el dolor, mejorar el sueño y normalizar el funcionamiento de todos los sistemas del cuerpo.
Este concepto ha inspirado nuevos enfoques para la investigación de la salud y la ciencia continúa demostrando que la conexión a tierra reduce la inflamación y promueve el funcionamiento normal de los sistemas del cuerpo.
Cómo conectar a tierra o tierra
La Tierra está llena de antioxidantes que permiten a nuestro cuerpo alcanzar el equilibrio a nivel celular . La práctica del grounding es muy sencilla y, mejor aún, ¡gratis! Todo lo que necesitas hacer es caminar descalzo o sentarte en el césped, la tierra, la arena o incluso sobre el cemento. Estas superficies son conductoras y la energía de la Tierra fluye a través de ellas hacia nuestros cuerpos.
El agua también es conductora, por lo que nadar o permanecer de pie en el agua es una actividad ideal para conectarse a tierra. Si mojarte o ensuciarte no es tu estilo, aún puedes conectarte al aire libre usando zapatos con suelas de cuero finas, que es el mejor tipo de calzado conductor natural. También hay calcetines de conexión a tierra que contienen materiales conductores para que pueda conectarse a tierra sin tocar físicamente la tierra.
Sin embargo, no todos los terrenos al aire libre son iguales. En lugares con mucho electrosmog EMF (ciudades abarrotadas o instalaciones de fabricación), muchos equipos de alta tecnología envían electricidad del suelo a tierra. Esto hace que la corriente de tierra (normalmente segura y saludable) varíe, y el exceso de corriente de tierra en muchos casos ha causado daños al ganado sensible. Encontrar un lugar para conectarse a tierra al aire libre que esté alejado de la tecnología y la radiación EMF es la forma más deseable y saludable de conectarse a tierra.
Si está confinado en el interior, se han desarrollado muchas herramientas para conectarlo a las frecuencias de la Tierra sin salir. La tecnología de conexión a tierra y conexión a tierra utilizada dentro de su hogar u oficina lo conecta con los electrones de la Tierra a través de una varilla de conexión a tierra que se coloca en el suelo afuera al lado de una ventana o puerta, o mediante un tomacorriente de pared con conexión a tierra dentro de la casa u oficina. Sin embargo, existe cierta controversia sobre si realmente benefician a las personas. Algunas personas se sienten mejor usando equipos de conexión a tierra mientras están adentro, pero otras se sienten peor.
Si se encuentra en un entorno con altos campos electromagnéticos, como en una oficina o un edificio de apartamentos con mucha tecnología, los campos electromagnéticos ambientales podrían utilizar su cuerpo como camino a tierra. Por lo tanto, estarías atrayendo los campos electromagnéticos de la habitación, antes de que se conecten a tierra y fluyan a través de ti hasta el tapete. El uso de un tomacorriente de pared con conexión a tierra no consume electricidad, pero puede detectar corrientes parásitas en el circuito de su casa.
¿Puede la conexión a tierra o la conexión a tierra reducir la exposición a los EMF?
Los dispositivos electrónicos móviles, como computadoras portátiles, tabletas y teléfonos celulares, emiten formas de radiación EMF de baja energía llamadas emisiones de radiofrecuencia (RF) y frecuencia extremadamente baja (ELF).
Si bien se ha demostrado que la conexión a tierra es una buena forma de contrarrestar muchos de los efectos de la radiación EMF, no puede impedir que la radiación EMF ingrese a su cuerpo. En algunos aspectos, la conexión a tierra también podría aumentar su exposición a los EMF, ya que atrae la radiación EMF ambiental.
Se ha demostrado que la conexión a tierra reduce los voltajes corporales inducidos generados por la exposición a ELF , que es emitido continuamente por dispositivos electrónicos sin conexión a tierra, así como por aquellos con cables eléctricos enchufados o internos.
Desafortunadamente, la conexión a tierra y la conexión a tierra no pueden protegernos completamente de la radiación EMF cuando usamos computadoras portátiles, tabletas, teléfonos celulares y otros dispositivos electrónicos directamente contra nuestro cuerpo.
Formas de minimizar la exposición a la radiación EMF
Reduzca la cantidad de fuentes EMF a su alrededor . Mantenga los dispositivos electrónicos fuera de su habitación y elimine las fuentes que sean innecesarias, como electrodomésticos inteligentes y auriculares o parlantes Bluetooth. Habilite el modo avión siempre que sea posible para eliminar la radiación inalámbrica que emiten sus dispositivos.
Mantenga las fuentes de CEM alejadas de su cuerpo. La radiación EMF se vuelve menos riesgosa para la salud cuanto más lejos está la fuente de su cuerpo y es más peligrosa cuando un dispositivo móvil toca su cabeza o torso (incluidos los órganos reproductivos y el corazón) . Usar su teléfono para enviar mensajes de texto presenta un riesgo mínimo, así que recuerde mantener la pantalla al menos a un pie de distancia de su cara y pecho mientras envía mensajes de texto. Mantenga su enrutador WiFi a 10 pies de distancia de usted. Mientras duerme, mantenga su teléfono celular y otros dispositivos móviles al menos a 4 pies de distancia. Evite quedarse dormido con el teléfono celular sobre la mesita de noche, debajo de la almohada o sobre el pecho.
Limite el tiempo que pasa en sus dispositivos. Limitar el tiempo que pasa frente a la pantalla es una regla general y eficaz para protegerse contra la radiación dañina, junto con otros beneficios . Cuando no esté utilizando sus dispositivos electrónicos, simplemente colóquelos lejos de su cuerpo hasta que los vuelva a utilizar activamente.
Utilice accesorios con cable cuando sea posible. Los dispositivos cableados emiten menos radiación EMF, ya que no utilizan señales inalámbricas para conectarse. Conectar el mouse, el teclado y los parlantes puede reducir la exposición a los EMF y el uso de audífonos con tubo de aire sin radiación que se conectan a su teléfono elimina efectivamente la radiación EMF que llega a su cabeza.
Si tiene dificultades con cualquiera de estos pasos, considere usar un escudo de protección contra la radiación EMF , que puede ayudar a reducir que las frecuencias EMF lleguen a su cuerpo.
La conexión a tierra puede ser un gran complemento a todas estas prácticas de reducción de campos electromagnéticos.
Para aquellos que son hipersensibles a los EMF, la conexión a tierra o la conexión a tierra en combinación con técnicas de reducción de EMF y escudos de EMF pueden brindarle el mayor alivio de los síntomas dolorosos y perturbadores. Sin embargo, todos pueden beneficiarse de la conexión a tierra diariamente y de reducir su exposición a la radiación EMF.
A pesar de la corta existencia de la tecnología moderna, la gran mayoría de los estadounidenses poseen un teléfono celular y otros dispositivos móviles. Los efectos a largo plazo de esta tecnología en la salud aún no se conocen completamente, pero muchas investigaciones muestran vínculos con consecuencias negativas para la salud. Como expertos en este campo, queremos hacer nuestra parte para asegurarnos de que las personas comprendan que hay muchas maneras de reducir su exposición a las emisiones nocivas de CEM.
Although Grounding & Earthing do have health benefits, they don't fully protect from EMF radiation when using mobile electronic devices against our bodies.
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