Mu bien argumentao, sí señor.
Pero desde al apercibimiento o el sobreseimiento, pasando por la multa -o la querella criminal o administrativa por exaltación del nazismo y el terrorismo y esas cosas, que el refranero dice "más vago que la chaqueta de un funcionario" y a éstos hay que empujarles- ya tienen para echarle encima ante de mandarle los guardias, no a llamarle la atención, sino a que lo detengan sin más miramientos.
Y encima le acusarán del delito de cachondeo de la superioridad y resistencia a la autoridad por intentar grabarles o algo.
Ya, ya te veo Timoteo.
La culpa, como la lotería de Navidad, siempre está muy repartida.
Sí, los políticos con su postureo, victimista o supremacista, que el empoderamiento femenino es otra clase de supremacismo ¿a ver si no?; tienen su parte.
Pero los funcionarios, excusándose en la obediencia debida, como los nazis, también tienen su parte de culpa ya que son el contrapoder natural al endiosamiento de los políticos, pues son los únicos que pueden darles de collejas a rodabrazo y filtrar las cagadas más notorias a la prensa, o darle tres cuartos al pregonero si es que la prensa está comprada a base de publicidad institucional.
No, no es magia, son tus impuestos.
Vamos, que la prensa también tiene su parte de culpa. Que tuvimos que enterarnos por la Tv rumana de que el que conducía un camión que atropelló a una multitud en un mercadillo navideño en la ciudad alemana de Münster era un kurdo porque la prensa alemana no lo quería decír, igual que se calló lo de las violaciones en la Nochevieja de 2015, o de 2016 que soy vejete y no me acuerdo mu bien.
Total que no va a haber farolas para tantos com deberíamos ahorcar.
Y no sigo porque me estoy poniendo de mala leche.
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FREE ZOUHAM o abandonad toda esperanza.
