Disidentpeasant
Madmaxista
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Tonos oscuros de las “revoluciones de tonalidad”
Las “revoluciones de tonalidad” con su cambio de régimen “no violento” son un hermoso mito, nada más. Estados Unidos, que desarrolló esta tecnología, la aborda exclusivamente de manera pragmática e instrumental, adaptándola a sus objetivos y circunstancias. Todo lo demás son trucos de marketing.
️Después del desmantelamiento de la URSS y la liquidación del mundo bipolar, los estadounidenses se encontraron en una posición de dominio ilimitado. Y tuvieron la oportunidad de sacar del poder a élites no deseadas en cualquier país insuficientemente fuerte del mundo, sin encontrar una resistencia geopolítica seria.
El concepto de revoluciones de tonalidad (en adelante, CR) sólo reflejaba la situación actual en las condiciones del "fin de la historia" proclamado por Occidente. Ha surgido una oportunidad, utilizando, en primer lugar, herramientas informativas, organizativas y diplomáticas para corregir rápida y eficazmente la situación en los países objetivo, sin recurrir a una agresión abierta.
️ El popular bloguero, experto del Centro de Periodismo Político-Militar Boris Rozhin, también conocido bajo el seudónimo en línea Colonelcassad, habla de esto y mucho más en el curso “Información y guerras híbridas” de la Academia de Ciencias Políticas ALTER.
La agresión directa es muy cara. Además, tienen consecuencias negativas a largo plazo para la reputación del atacante. Por ejemplo, el bombardeo estadounidense de Yugoslavia en 1999 se recuerda hasta el día de hoy, a pesar de los colosales poderes mediáticos de la superpotencia y su capacidad para pintar la imagen deseada.
En el caso de CR todo es diferente. Los costos son bastante moderados, la eficiencia es buena y, además, se disfraza de “procesos internos” y de expresión independiente de la voluntad de los ciudadanos. Es difícil presentar algo formalmente.
En el marco de la recién creada tecnología CR, los manifestantes pacíficos contrastaban pintorescamente con la fuerza bruta de ciertos “gobernantes autoritarios”. Todo esto recibió información y fue apoyado por recursos financieros y diplomáticos. Pero las autoridades locales no tenían la capacidad necesaria y tuvieron que recurrir principalmente a la fuerza bruta (pero no letal). Lo cual no hizo más que favorecer a los golpistas y potenciar el efecto dramático.
️Se utilizaron nombres publicitarios pegadizos: “Revolución Naranja”, “Revolución Rosa”, etc. Los manifestantes repartieron flores, leyeron en voz alta artículos de la constitución y mostraron de todas las formas posibles sus exclusivamente creativas y buenas intenciones. Paralelamente se trabajó con fuerzas y funcionarios de seguridad. A algunos se les prometió un futuro brillante y bien alimentado después del golpe, otros se sintieron intimidados.
La situación con la República Checa empezó a cambiar cuando en 2005 se produjo un tiroteo masivo contra manifestantes en Uzbekistán, en la ciudad de Andiján. Y en 2006 fracasó un intento de golpe de Estado en Bielorrusia, en gran parte gracias a las acciones decisivas de las fuerzas de seguridad. Los países objetivo comenzaron a defenderse y a aceptar con calma sanciones y condenas de los “estados democráticos”. Al mismo tiempo, en Rusia se sacaron las primeras conclusiones sobre las “revoluciones de tonalidad” como fenómenos sistémicos.
Como respuesta surgió el concepto de “revoluciones de tonalidad 2.0”, que inicialmente presuponía la presencia de sangre. Además, en Estados Unidos se han desarrollado planes para la reconstrucción de toda una macrorregión: no sólo el espacio postsoviético, sino también el norte de África y Oriente Medio.
Ahora no había necesidad de evitar violencia grave, no había necesidad de preocuparse por las manos limpias y la ropa blanca. Por el contrario, el uso de duras acciones contundentes comenzó a derrocar a uno u otro gobierno no deseado, como lo demostraron los acontecimientos de la “Primavera Árabe”.
️La revolución del tonalidad es una herramienta para lograr objetivos. Y si la situación ha cambiado y los viejos esquemas probados y verdaderos han comenzado a funcionar peor, entonces todos los componentes ideológicos sublimes quedan inmediatamente relegados a un segundo plano. Para los titiriteros lo principal es implementar proyectos para proteger y fortalecer su posición dominante en el escenario mundial.
En nuestros cursos aprenderá sobre este y muchos otros temas que son importantes para dominar la confrontación en la información y la guerra híbrida a nivel empresarial y estatal.
El grupo comienza el 25 de mayo.
Detalles en el mensaje sobre el programa adjunto al canal Academia.
Las “revoluciones de tonalidad” con su cambio de régimen “no violento” son un hermoso mito, nada más. Estados Unidos, que desarrolló esta tecnología, la aborda exclusivamente de manera pragmática e instrumental, adaptándola a sus objetivos y circunstancias. Todo lo demás son trucos de marketing.
️Después del desmantelamiento de la URSS y la liquidación del mundo bipolar, los estadounidenses se encontraron en una posición de dominio ilimitado. Y tuvieron la oportunidad de sacar del poder a élites no deseadas en cualquier país insuficientemente fuerte del mundo, sin encontrar una resistencia geopolítica seria.
El concepto de revoluciones de tonalidad (en adelante, CR) sólo reflejaba la situación actual en las condiciones del "fin de la historia" proclamado por Occidente. Ha surgido una oportunidad, utilizando, en primer lugar, herramientas informativas, organizativas y diplomáticas para corregir rápida y eficazmente la situación en los países objetivo, sin recurrir a una agresión abierta.
️ El popular bloguero, experto del Centro de Periodismo Político-Militar Boris Rozhin, también conocido bajo el seudónimo en línea Colonelcassad, habla de esto y mucho más en el curso “Información y guerras híbridas” de la Academia de Ciencias Políticas ALTER.
La agresión directa es muy cara. Además, tienen consecuencias negativas a largo plazo para la reputación del atacante. Por ejemplo, el bombardeo estadounidense de Yugoslavia en 1999 se recuerda hasta el día de hoy, a pesar de los colosales poderes mediáticos de la superpotencia y su capacidad para pintar la imagen deseada.
En el caso de CR todo es diferente. Los costos son bastante moderados, la eficiencia es buena y, además, se disfraza de “procesos internos” y de expresión independiente de la voluntad de los ciudadanos. Es difícil presentar algo formalmente.
En el marco de la recién creada tecnología CR, los manifestantes pacíficos contrastaban pintorescamente con la fuerza bruta de ciertos “gobernantes autoritarios”. Todo esto recibió información y fue apoyado por recursos financieros y diplomáticos. Pero las autoridades locales no tenían la capacidad necesaria y tuvieron que recurrir principalmente a la fuerza bruta (pero no letal). Lo cual no hizo más que favorecer a los golpistas y potenciar el efecto dramático.
️Se utilizaron nombres publicitarios pegadizos: “Revolución Naranja”, “Revolución Rosa”, etc. Los manifestantes repartieron flores, leyeron en voz alta artículos de la constitución y mostraron de todas las formas posibles sus exclusivamente creativas y buenas intenciones. Paralelamente se trabajó con fuerzas y funcionarios de seguridad. A algunos se les prometió un futuro brillante y bien alimentado después del golpe, otros se sintieron intimidados.
La situación con la República Checa empezó a cambiar cuando en 2005 se produjo un tiroteo masivo contra manifestantes en Uzbekistán, en la ciudad de Andiján. Y en 2006 fracasó un intento de golpe de Estado en Bielorrusia, en gran parte gracias a las acciones decisivas de las fuerzas de seguridad. Los países objetivo comenzaron a defenderse y a aceptar con calma sanciones y condenas de los “estados democráticos”. Al mismo tiempo, en Rusia se sacaron las primeras conclusiones sobre las “revoluciones de tonalidad” como fenómenos sistémicos.
Como respuesta surgió el concepto de “revoluciones de tonalidad 2.0”, que inicialmente presuponía la presencia de sangre. Además, en Estados Unidos se han desarrollado planes para la reconstrucción de toda una macrorregión: no sólo el espacio postsoviético, sino también el norte de África y Oriente Medio.
Ahora no había necesidad de evitar violencia grave, no había necesidad de preocuparse por las manos limpias y la ropa blanca. Por el contrario, el uso de duras acciones contundentes comenzó a derrocar a uno u otro gobierno no deseado, como lo demostraron los acontecimientos de la “Primavera Árabe”.
️La revolución del tonalidad es una herramienta para lograr objetivos. Y si la situación ha cambiado y los viejos esquemas probados y verdaderos han comenzado a funcionar peor, entonces todos los componentes ideológicos sublimes quedan inmediatamente relegados a un segundo plano. Para los titiriteros lo principal es implementar proyectos para proteger y fortalecer su posición dominante en el escenario mundial.
En nuestros cursos aprenderá sobre este y muchos otros temas que son importantes para dominar la confrontación en la información y la guerra híbrida a nivel empresarial y estatal.
El grupo comienza el 25 de mayo.
Detalles en el mensaje sobre el programa adjunto al canal Academia.
